Muy cerca de Pirineos se encuentran tres pueblos muy tranquilos en la montaña para disfrutar como opciones para una escapada rural e ideal para desconectarse por completo de la rutina en cualquier momento del año.
Sus maravillosos paisajes, sus costumbres y la amabilidad de sus habitantes hacen de estos tres destinos las mejores opciones para descubrir distintas experiencias en escenarios que combinan la calma con lo mejor de la montaña y la naturaleza.
Las 3 escapadas rurales a pueblos de montaña cerca de los Pirineos
Bossòst
A solo 43 kilómetros de Pirineros, el pueblo soñado de Bossòst, en Lérida, España, se encuentra situado en la parte occidental de la comarca del Valle de Arán. Esta villa aranesa, situada a 710 metros de altitud, es atravesada por el curso del río Garona.
Su monumento principal es la Iglesia Parroquial de la Asunción de María y este pueblo no solo conserva toda la belleza de su casco histórico, sino que su estilo arquitectónico y urbanístico deja ver su cercanía con la frontera francesa.
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Este pueblo es ideal para los amantes de la naturaleza, el senderismo o el cicloturismo. Un paseo por la Ruta de las 7 Ermitas Protectoras, lo hará una experiencia única por su particular belleza. Además, ofrece una gran variedad de opciones en alojamiento turísticos y rurales, y gastronómicos.
Vielha
La hermosa villa de Vielha tiene un encanto especial, es la capital del Valle de Arán y queda a solo 24,4 kilómetros, de los Pirineos. Rodeada por este valle, no solo brinda una maravillosa vida natural donde se pueden practicar distintos deportes, sino que además se conserva como un importante patrimonio arquitectónico y cultural para una escapada única.
Con las montañas como entorno que la embellecen desde todos los ángulos, esta villa se puede conocer transitando por sus avenidas y edificios más modernos, las que además forman un núcleo comercial con todo tipo de comercios que se especializan en todos los deportes de aventura, de alta montaña y nieve, que se pueden practicar en este hermoso lugar, sobre todo en otoño e invierno.
En su parte histórica cuenta con una gran variedad de edificios que pueden recorrerse para descubrir su casco antiguo como la iglesia de Sant Miquèu y su imponente torre campanario. Además de sus imponentes pinturas góticas y barrocas que la hacen un lugar único con hermosos tesoros en su interior.
Arties
Ya mucho más cerca de Pirineos, a solo 18 kilómetros, Arties es un pueblo mágico que parece salido de un cuento y es considerado como uno de los más bonitos de España.
Escondido entre dos ríos y con las montañas de marco, sus bellas casas de piedra, con un imponente castillo ruinoso y una impactante iglesia de estilo románico, este pueblo catalán es tan hermoso de día como de noche. Transitarlo es caminar por un auténtico legado cultural rodeado de belleza natural.
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Y más allá de su patrimonio cultural, este pueblo es una invitación a explorar la naturaleza que lo rodea por su cercanía al Parque Natural Alto Pirineo. Además, se puede disfrutar de un espacio recreativo al aire libre donde viven dos osos dentro de una zona delimitada y protegida.
Para los amantes de la pesca, son el río Garona y los lagos que rodean este pueblo los escenarios ideales para practicar este deporte y disfrutar de su hermosa calma.
