5 hoteles boutique para hospedarte en Palermo

Propuestas locales para los viajeros que huyen de los complejos de varias torres y cientos de habitaciones; estos hoteles boutique en Palermo prestan gran atención al detalle en su decoración y arquitectura.

Home

Es posible estar en pleno Buenos Aires y a la vez no estarlo. Sentirte como en tu casa, pero que no lo sea. Cruzar una gata negra y que sea buena suerte. Sí, Mulata es la anfitriona feliz y felina de este hotel boutique ubicado en Palermo Hollywood donde los preconceptos sobre lo que la hotelería debería ser se reescriben en base a esta nueva experiencia.

Su arquitectura, de inspiración asiática, busca fusionar la naturaleza salvaje de un jardín exuberante planificado por Chunchuna Villafañe, con los interiores estilo mid-century de 20 habitaciones diseñadas por sus dueños, Patricia O’Shea y Tom Rixton.

Este alojamiento, que ya cumple 16 años y 12 premios, fue pensando por ellos luego de experimentar de primera mano la falta de propuestas locales -por fuera de las grandes cadenas hoteleras- que supieran atender al turista y le brindaran una atención personalizada. En Home hay servicio de conserjería las 24 horas, room service de 8hs a 18hs, spa con reserva e incluso, si viajas con niños, servicio de niñera solicitado con antelación.

Desayunar bajo su cerezo Sakura en flor es un acto casi ceremonial del que no todos pueden disfrutar, ya que abre sus capullos solo dos semanas al año. Pero… sí es posible deleitarse con un desayuno gourmet servido al aire libre y rodeado por un jardín de árboles nativos, jazmines y helechos. Aquí uno puede elegir entre varias opciones, así que toma nota de los destacados: huevos benedictinos con jamón crudo, yogur de búfala con granola y frutos rojos, y roll de canela.

Si no llegaras a hospedarte en Home igual te recomendamos visitar el restaurante, que está abierto tanto para huéspedes como para público general, todos los días de la semana, durante el desayuno, el almuerzo y la merienda. Para la cena, solo los jueves, viernes y sábados de 18 a 22hs.  

La piscina es exclusiva para huéspedes y abre desde mediados de octubre hasta fin de marzo. Si te alojas en la Garden Suite, con entrada privada desde el jardín, tendrás además una piscina propia junto a los grandes ventanales de tu habitación.

Cada detalle, desde la Guía de Viaje Home que te entregan al ingresar al hotel hasta los empapelados originales de 1926 traídos de Francia e Inglaterra ponen de manifiesto la voluntad de hacerte sentir en casa; pero no en cualquier casa, en aquella que anida en nuestros recuerdos más íntimos, la que está construida cinematográficamente en nuestra memoria, donde se mezclan la nostalgia y el amor.  

Legado Mítico

A diferencia de Home, es imposible estar en Legado Mítico y no sentirse en Buenos Aires.

El hotel está construido bajo una narrativa casi de guion museográfico que sostiene un elegante recorrido por la historia de la Argentina y adentra al viajero en sus personalidades más emblemáticas. Evita, Gardel, San Martín, Borges, Mafalda, Martín Fierro, entre otros, asoman en cuadros, libros, reliquias e imponen su carácter a cada una de las 11 habitaciones de este hotel boutique.

La recepción, atendida por un staff bien argentino detrás de un escritorio robusto, es la antesala a una propiedad horizontal que despliega en su planta baja un gran salón de bibliotecas y sofás donde descansar y leer, y mesas para tomar el desayuno por la mañana. Un desayuno muy local: medialunas, tostadas, frutas y torta de ricota. Hacia el fondo, un pequeño jardín con camastros que funciona como pulmón verde del edificio, donde uno puede salir a respirar paz, calma y “porteñidad”.

La decoración, selecta y soberbia, de maderas oscuras y elementos decorativos autóctonos, como telares, cuero y plata, se mantiene también en las habitaciones, donde el relato se individualiza y se añaden valores particulares de cada emblema. Tomemos por caso la habitación Mítica Clásica El Gaucho; decoran boleadoras, cinchas, frenos, marcas de ganado y el infaltable, un ejemplar histórico del libro Martín Fierro.

Los arquitectos Javier Figueroa y Horacio Menéndez son los dueños y restauradores del hotel. Con su trabajo, potencian y ponen en valor propiedades para uso personal o comercial. A ello le suman un compromiso confeso con la difusión y promoción del patrimonio histórico-cultural nacional, como lo hacen notar aquí, en Legado Mítico Salta y en la reforma del hoy vecino hotel boutique Jardín Escondido.

A tener en cuenta, el hotel acepta niños solo a partir de los 12 años.

Be Jardín Escondido

Te adelanté quiénes reformaron y dieron carácter a ésta casa, hoy hotel boutique, pero me faltó revelar quién está detrás de ella: nada más y nada menos que Francis Ford Coppola.

El director de cine es un amante de Buenos Aires y Be Jardín Escondido es su lugar en la ciudad. Aquí se hospedó durante la escritura y grabación de la película Tetro, y cada vez que puede regresa en busca de inspiración, vino y asado.

Como su nombre lo indica, la joya del lugar es su jardín central con piscina, al que se accede de manera directa solo desde algunas de las 7 habitaciones de la casa. Algunas ellas apodada como uno de los miembros de la familia. La Francis Suite es la misma en la que él durmió durante los dos años en que vivió en la ciudad y aún guarda el portatrajes de viaje original del director de cine.

La vegetación tupida del patio se cuela por los ventanales del espacioso salón principal, en el que sofás de cuero y una biblioteca de cuatros metros de ancho repleta de libros de artistas latinoamericanos con dedicatorias a Francis invitan a descansar.

Allí, donde decoran ponchos, objetos y fotos del Norte argentino seleccionados por él y su esposa, la documentalista Eleanor Coppola, se puede tomar un desayuno completo a la carta, almorzar, cenar, tomar unos tragos, mirar unos Dvds de su colección privada, jugar juegos de mesa o tocar la guitarra. También preparar un asado en la parrilla del patio.

El servicio de consejería te puede ayudar a hacer reservaciones de shows, tours, traslados, clases de gastronomía, golf y polo, sugerir lugares de comprar

Este remanso de acogedora decoración rural es un oasis de calma en medio de uno de los barrios más activos de la ciudad de Buenos Aires.

Palermitano

Este hotel boutique está en Palermo, pero podría no estarlo. Mejor dicho, está en Palermo y es un hype de Palermo. Palermitano by DOT Boutique decodifica una de las características más distintivas del barrio en el que se emplaza: su eclecticismo.

Su decoración está inspirada en la noche porteña pero traducida al lenguaje del Art Deco por el arquitecto David Collins. Sus lujosas habitaciones tienen camas queen, pisos de roble de Eslovenia, baño de mármol, escritorio, minibar y TV. El servicio incluye el desayuno en la tarifa.

Además de una terraza con pileta, sus cimientos también han cobijado dos propuestas exitosas con identidad propia: el restaurante Sipan, liderado por el chef José Castro Mendivil, y el Isabel Bar. El primero tiene un concepto open kitchen que permite a los comensales ver a los cocineros en acción mientras orquestan una cocina fusión peruana japonesa muy reconocido en la escena local. El segundo, inspirado en los clubs de Londres, Nueva York y Berlín, encarna la rebeldía del rock&roll y pone a disposición de los visitantes tragos clásicos, ejecutados a la perfección. Ambos abren de martes a domingo de 19.30 a 00hs y cierra los lunes.

Casa Sur

Volvemos a la sección del barrio dedicada a los estudios y productoras de TV para presentar la versión palermitana de la colección de hoteles Casa Sur, donde se rinde homenaje a la modernidad. Su edificio, el más grande de los cinco que mencionamos en la nota, cuenta con 61 habitaciones decoradas con un estilo chic y contemporáneo, con muebles de líneas minimalista, pisos de madera y delicadas texturas. Todas con Tv, iPod dock, mini bar, cafetera Nespresso, aire acondicionado y wifi. Las suites tienen, además, una gran biblioteca que separa la habitación en dos ambientes.

La propuesta de Casa Sur tiene todo lo esperable de un hotel de su categoría: un spa donde recibir diversos tipos de masajes (indu, relajantes, descontracturantes, faciales, reflexología, drenaje linfático, shitasu, californiano); un gimnasio con máquinas con la última tecnología disponible para ejercitarse; una piscina y solárium rodeados de vegetación para refrescarse en primavera y verano; un destacadísimo rooftop bar de unos 400 m2 con una de las terrazas más increíble de la ciudad y un restaurante con una propuesta vanguardista como la de Sacro, donde encuentras comida del mundo a base de plantas.