Manhattan, el distrito más densamente poblado de los cinco que conforman la ciudad de Nueva York, está compuesto principalmente por la isla de Manhattan, rodeada por los ríos Hudson, East y Harlem. Es el corazón de «la Gran Manzana» y se destaca como uno de los centros culturales, financieros y comerciales más importantes del mundo.
Entre los sitios icónicos de Manhattan se encuentran los imponentes rascacielos como el Empire State Building, la vibrante Times Square iluminada por neones, y los famosos teatros de Broadway. Los barrios de Manhattan se dividen en distintos sectores, cada uno con su propio carácter y atractivo.
Así se dividen los barrios de Manhattan en Nueva York
Los barrios de Manhattan en Nueva York se distribuyen en cinco zonas principales, que van de norte a sur: Washington Heights, Harlem, Upper Manhattan, Midtown y Lower Manhattan. Estas áreas representan una parte significativa de la activa vida urbana de la ciudad y ofrecen una amplia gama de experiencias culturales, históricas y gastronómicas.
Además, cada uno de los distritos de Nueva York, también conocidos como boroughs, corresponde a un condado específico, siendo Manhattan el equivalente al Condado de Nueva York, y otros como Brooklyn, Queens, Bronx y Staten Island que complementan la diversidad urbana de la metrópolis.
Cada uno de los barrios de Manhattan tiene su propio estilo y atractivo. Lower Manhattan alberga Wall Street y el Distrito Financiero. Midtown Manhattan es famoso por sus rascacielos y puntos turísticos como Times Square y el Rockefeller Center. El Upper East Side y Upper West Side son conocidos por sus lujosas residencias y acceso a Central Park. Además, vecindarios como Greenwich Village, Soho y Harlem ofrecen una rica diversidad cultural y una vibrante vida nocturna.
Estos son los barrios de Manhattan en Nueva York
- Washington Heights
- Harlem
- Upper Manhattan
- Midtown Manhattan
- Lower Manhattan
Cuándo es la mejor época para viajar a Nueva York
La primavera es considerada como la mejor época para viajar a Nueva York debido a su clima moderado y la belleza natural en su máximo esplendor. Sin embargo, tiene algunos contras, como que estará lleno de turistas. Se recomienda viajar en otoño, la afluencia de turistas disminuye después del verano, lo que hace que muchas tarifas sean más económicas.
Si el interés está en ver Nueva York en épocas festivas, como fin de año, es una experiencia única. La temporada alta de turismo en invierno es principalmente en diciembre. Pero, en enero o febrero, ya la afluencia del turismo merma y se puede recorrer la «Gran Manzana» con bajas temperaturas. Eso sí, hay que llevar muchísimo abrigo.
