Can Lluc combina la Ibiza relajada, que enamoró a sus primeros visitantes, con una ubicación privilegiada para no perderte nada de lo que la isla ofrece.
Desconectar la mente y ofrecer al cuerpo un ambiente de tranquilidad es un privilegio cada vez más anhelado. Por eso gente de todo el mundo acude a Ibiza, porque aún hay lugares que trasmiten energía, conexión con la naturaleza, relajación y el disfrute. La Ibiza auténtica que lleva décadas enamorando a los que la visitan. Así es el refugio exclusivo Can Lluc, “el lugar donde la isla descansa”. Autenticidad y desconexión a quince minutos de cualquier punto de Ibiza, para divertirte, relajarte, comer bien, pasar un día en barco y bailar en los beach clubs.
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Situado en un valle tranquilo
Rodeado de naturaleza, encontramos un espacio de serenidad en uno de los mejores agroturismos de la isla. Can Lluc te invita a una experiencia genuina en la que descansar en el campo ibicenco como hicieron los primeros visitantes de la isla, donde la naturaleza y la atención al detalle coexisten en armonía perfecta.
Se trata de una antigua casa y finca de labor convertida en hotel boutique. Un lugar que mantiene su herencia familiar e incorpora nuevas generaciones a su filosofía de trasmitir la esencia de la auténtica Ibiza, de una manera sostenible y responsable con el medio ambiente y la comunidad local.
Rodeado de frondosos bosques de pinos y bellos paisajes, cuenta con una casa principal y anexos de más de 300 años de antigüedad, con una arquitectura tradicional ibicenca, muros de piedra y techos de madera. Can Lluc combina habitaciones rústicas de la antigua casa de labor con nuevas villas, que han sido cuidadosamente decoradas con elementos y mobiliario originales de la familia.
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Mirando alrededor, encontramos jardines exuberantes con olivos, limoneros y pinos aromáticos que proporcionan una atmósfera de paz perfecta para las actividades y servicios que proponen, como retiros personalizados, talleres, rutas o descansar junto a su piscina. Además, las puestas de sol en Can Lluc son mágicas y ofrecen un espectáculo natural que realza la belleza del entorno.
Siguiendo su compromiso con la sostenibilidad y la gastronomía local, encontramos el acogedor y elegante Restaurante Can Lluc, que ofrece productos frescos y naturales de huertos y granjas cercanas. Una experiencia culinaria que celebra la cocina mediterránea e ibicenca, con un enfoque en ingredientes locales y nacionales de temporada junto a una propuesta de vinos y coctelería acordes a su filosofía.
