Suppli, una trattoria romana en Bucareli 
Suppli

Esta zona está llena de antiguas imprentas, que fueron cerrando y convirtiéndose en algo más, estamos en Bucareli, en el centro de la CDMX, cerca de los edificios de El Universal y Excélsior, dos de los periódicos más antiguos que aún se imprimen en la capital mexicana. SUPPLI, es una nueva trattoría romana, que se ubica en una de estas construcciones.

La casa, donde ahora hay una barra de cocteles, mesas pequeñas y una cocina con vista al Reloj Chino, tiene más de 100 años de haber sido construida y lo que se sabe es que fue imprenta, pero también fungió como un negocio de tortas. 

Mientras platico con Alejandra y Jean, quienes son los creadores de este proyecto, se escuchan relámpagos, sin embargo, la tormenta no detiene la llegada de los comensales, la lista de reservaciones está repleta y apenas es miércoles. 

El antecedente de este restaurante es Pastificio, una tienda y taller de pasta fresca. La misma que puedes degustar en Suppli. Del menú, que por cierto es pequeño (y eso me encanta) pídete el mezze maniche alla carbonara y el occhi di ricotta con pesto rosso. Uno de los secretos para conservar la frescura de los insumos es que hay cinco elementos base que se utilizan en muchas de las preparaciones y estos son: queso pecorino, guanciale (o cachete de cerdo), tomate, pasta y anchoas.

Puedes elegir vino por copeo, pero las etiquetas de caldos italianos y franceses son jóvenes, ligeras y fáciles de beber, así que mejor opta por la botella.

“Siempre supimos que queríamos una cocina sin pretensiones, muy sencilla y clásica”, dice Ale, quien estudió gastronomía y empezó a trabajar en restaurantes a los 17 años. “Es (un restaurante) casual”. Un lugar en el que suceden historias para recordar en estas mismas mesas en unos 20 años o más.

La poca separación entre los asientos invita a la plática con el de junto, aunque sea un desconocido, y el ambiente relajado, a extender la sobremesa y pasar de las pastas y el vino a la panna cotta con café.