
A dos horas de la Ciudad de México, entre la naturaleza de Hidalgo, se encuentra un lugar lleno de historia y paisajes: Mineral del Chico. Este pueblito minero, cuyo origen se remonta al descubrimiento de minas de plata, fue y es históricamente un destino destacado para disfrutar del aire libre y las montañas.
Aunque la minería ya no es la actividad principal, el pueblo supo preservar su encanto a través de su arquitectura colonial y sus calles empedradas. Pero eso no es todo, porque cabe remarcar, Mineral de Chico está rodeado por el Parque Nacional El Chico. Este último, es uno de los más antiguos de México y abarca más de 2 mil 700 hectáreas.
Los Pueblos Mágicos de Hidalgo para hacer una escapada de verano

Así es Mineral de Chico, un pueblito minero lleno de historia y tradición
Mineral del Chico, conocido inicialmente como Atotonilco, fue un lugar importante desde la época colonial debido a la riqueza de sus minas de plata. Durante su época de esplendor, se explotaban cerca de 300 minas en la zona, lo que impulsó el desarrollo de la comunidad.
A medida que el auge minero fue decayendo, el pueblo se transformó en un destino turístico, preservando su patrimonio histórico mientras promovía el ecoturismo.
Este pueblito minero está ubicado a una altitud de 2 mil 342 metros sobre el nivel del mar, dándole un clima fresco, ideal para disfrutar durante el otoño. Aquí, las temperaturas que promedian los 14 °C.
Pueblos Mágicos de Hidalgo: dónde están ubicados y cómo visitarlos
Entre los atractivos que destacan en Mineral del Chico están sus construcciones coloniales. Ejemplos de esto último son la Iglesia de la Purísima Concepción, la Plaza Principal y las casonas de techos rojos que se alinean a lo largo de las empedradas calles.
Además, el Museo de Minería es un recordatorio del pasado industrial de la región. Por su parte, las minas de San Antonio y La Guadalupe son sitios de interés para quienes desean aprender más sobre la historia minera.
La oferta gastronómica del pueblo es igualmente rica. Los visitantes pueden disfrutar de platillos típicos como la barbacoa, el pan de muerto y las famosas tortitas de flores de madroño, una especialidad local. Durante el otoño, es común encontrar ingredientes de temporada como los hongos, especialmente los que crecen en las montañas circundantes.

Actividades al aire libre en el Parque Nacional El Chico
El Parque Nacional El Chico, ubicado a pocos kilómetros del pueblo, es uno de los grandes atractivos de la región. Con más de 2 mil 700 hectáreas de bosques de pino, encino y oyamel, este parque alberga muchas especies de flora y fauna.
Su inmensidad y geologia, lo hacen perfecto para un gran repertorio de actividades. Y es que, dentro del parque, hay más de 200 formaciones rocosas. Esto lo convierte en un lugar ideal para la escalada en roca, una de las actividades más populares.
Las áreas conocidas como Las Ventanas y Peña del Cuervo son especialmente valoradas por los aficionados a este deporte, ya que ofrecen retos tanto para principiantes como para escaladores experimentados. Además, el parque cuenta con senderos bien señalizados para quienes prefieren el senderismo o el ciclismo de montaña.
Para los amantes del camping, el parque ofrece varias opciones. Los campamentos de Dos Aguas, Conejos y Los Cedros están habilitados con áreas para acampar, cabañas y servicios básicos, lo que facilita pasar la noche bajo las estrellas en plena naturaleza.
En tanto, la pesca deportiva es otra actividad permitida en las presas que rodean el parque, como la Presa El Cedral, donde también se puede disfrutar de paseos en lancha.
Para concluir, una visita al parque no estaría completa sin detenerse en el mirador de Peña del Cuervo, desde donde es posible obtener una de las mejores vistas panorámicas de la región. Este mirador, accesible a través de una escalinata de piedra, es uno de los puntos más altos del parque y permite apreciar la majestuosidad del paisaje montañoso.