Sumergido en el interior de África Occidental, a tan solo 35 kilómetros de Dakar, la capital de Senegal, encontramos un fenómeno natural único: el Lago Rosa, conocido localmente como Lac Retba, cautiva a viajeros de todo el mundo.
Su nombre proviene del color inusual de sus aguas, rosado, que varía en intensidad de color según la hora del día y la estación del año.
¿Por qué es rosa?
El secreto del color de las aguas de este lago reside en una microalga denominada Dunaliella salina, cuya producción de pigmento rojizo, debido a la concentración de la sal, hace el agua rosada.
A medida que los rayos del sol se reflejan en la superficie del lago, proporciona al agua de tonos entre el fucsia y el violeta. Gracias a ello, se crea un espectáculo visual único.
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Un lago aún más salado que el mar
El Lago Rosa contiene una salinidad que llega a superar incluso el del Mar Muerto. Esto hace que sus visitantes puedan flotar fácilmente en el agua. Además, tener la salinidad alta también hace que el lago se convierta en una fuente importante de sal para las comunidades locales.
Los trabajadores extraen a diario montañas blancas de sal. Esta sal, cuando se seca y se prepara, se distribuye. Esto es una actividad tradicional que ha formado puestos de trabajo, dando forma a la economía de la zona.
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Un destino turístico único
El Lago Rosa no es famoso exclusivamente por su color, también lo es por su papel en la historia de las competiciones internacionales: punto final en el rally París-Dakar durante años.
Actualmente, es un destino que combina naturaleza, cultura y aventura. Entre otras actividades los visitantes pueden:
- Sumergirse y experimentar la flotabilidad del lago gracias al exceso de sal.
- Conocer de cerca el proceso de recolección de sal.
- Navegar en pequeñas embarcaciones recorriendo las aguas rosas y blancas, debido al contraste del colorante y la sal.
- Disfrutar de la gastronomía senegalesa con variedad de sabores africanos, árabes y francesas.
Mejor época para visitar el tesoro natural de Senegal
La mejor época para visitar este Lago es de noviembre a junio. En esos meses la concentración de sal alcanza su máximo y la luz del sol realza los tonos. Cuando llega el atardecer, el lago se transforma en un lienzo salpicado de colores mágicos.
El Lago Rosa es mucho más que un destino turístico: es símbolo de riqueza natural y cultural de Senegal. La belleza efímera y cambiante que contiene recuerda la importancia de conservar los ecosistemas únicos.
