¿Cuándo ver ballenas jorobadas en República Dominicana?
Cuándo ver ballenas en Dominicana. lisabskelton

Cuando se sueña con una escapada al Caribe, lo más probable es que lo primero que venga a la mente sean sus playas de arena blanca como azúcar, palmeras meciéndose y peces de colores del arcoíris. Pero hay una imagen más que necesitas añadir a este ensueño: ballenas nadando cerca.

Nueva Inglaterra, California y la costa del Pacífico mexicano suelen llevarse toda la atención cuando se trata de avistamiento de ballenas, pero resulta que no deberías descartar al Caribe. Esto se debe a que sus mares turquesa también albergan su propia migración estacional de la ballena jorobada del Atlántico Norte, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de ver a estas hermosas criaturas en aguas cristalinas durante su temporada de apareamiento y cría.

Como explica Atlantic Whales, cada temporada invernal en el hemisferio norte, “miles de ballenas jorobadas del océano Atlántico Norte migran hacia las cálidas aguas de la República Dominicana para aparearse y dar a luz a sus crías”, lo que significa que el mejor momento para planear una escapada es de enero a abril. Es decir, el mejor momento para escapar del frío de todos modos. Esto, añade el sitio, “es el grueso de la migración y la temporada de reproducción de la ballena jorobada”.

Durante esta temporada, las ballenas jorobadas se congregan por miles alrededor de la península de Samaná, lo que hace que un avistamiento sea casi una garantía. “Serás testigo de todos los comportamientos de una población de ballenas próspera, incluyendo saltos fuera del agua, golpes con las aletas, golpes con la cola y madres cuidando a sus nuevos bebés”, añade Atlantic Whales.

Según la Comisión Ballenera Internacional, los grupos de conservación y las autoridades locales han establecido protecciones estrictas para salvaguardar a las ballenas en la bahía de Samaná. Las regulaciones limitan el avistamiento de ballenas a no más de tres embarcaciones a la vez, exigen que las embarcaciones en espera se mantengan al menos a 820 pies de distancia y establecen distancias mínimas de aproximación de 165 pies para ballenas adultas y 262 pies para grupos con crías. Para reducir el estrés en los animales, las embarcaciones también están restringidas a un máximo de 30 minutos con un solo grupo cuando hay otros esperando.

Salir al agua con un operador confiable ayuda a garantizar tanto una experiencia de calidad para ti como para las ballenas. Atlantic Whales sugiere este tour de día completo con Uvero Alto, mientras que Whale Samaná ofrece uno de los recorridos con más años de operación en la región y es transparente sobre sus medidas de salud y seguridad para las criaturas.

Y, si tienes mucha suerte, incluso podrías llegar a verlas desde tu habitación en lugares como Ocama, un hotel de solo villas con vista a la bahía de Rincón en la península de Samaná, que también puede organizarte recorridos privados de avistamiento de ballenas si las ballenas no pasan nadando y saludando con una aleta a su paso. Pero recuerda, incluso si no ves ballenas, sigues estando en el paraíso, así que eso ya es algo.