Cómo surgió la Guía Michelin
Foto: Uladzimir Zuyeu

Quizá te preguntes por qué una empresa de neumáticos entrega reconocimientos a los que considera que son los mejores restaurantes y se ha convertido en un referente del bien comer a nivel internacional. Pues bien, te invitamos a conocer el origen de la Guía Michelin en las próximas líneas. 

“Todo empezó en Clermont-Ferrand, en el centro de Francia”, se lee en el sitio web de la Guía Michelin en España. “En 1889, cuando los hermanos André y Edouard Michelin fundaron la empresa de neumáticos que lleva su nombre”. 

La guía de tapas rojas no pretendía ser un referente gastronómico, se trataba más bien de un incentivo para invitar a los automovilistas a lanzarse a la carretera. Con información práctica como mapas, instrucciones para cambiar una llanta y recomendaciones de lugares para comer y dormir. 

La primera edición se publicó en 1900; posteriormente se distribuyó de forma gratuita durante 20 años, hasta que André Michelin descubrió que una de sus preciadas guías estaba siendo usada como calza para un banco. 

Este acontecimiento lo llevó a tomar la decisión de ponerle un precio a la Guía Michelin; a partir de 1920 quien quisiera acceder un ejemplar debía pagar 7 francos de aquella época. Y es que dicen que “el hombre solo respeta de verdad aquello por lo que paga”. 

Tres años después apareció la sección de “Hoteles y restaurantes recomendados” y por primera vez se mencionó a restaurantes independientes (fuera de un hotel).

Para esta tarea se reclutó a un equipo de comensales misteriosos, quienes  visitarían y valorarían de forma anónima a los establecimientos. Estas figuras continúan hasta el día de hoy y se conocen como “inspectores”. 

Así surgieron las Estrellas Michelin 

En 1926 se comenzó a valorar a los establecimientos de alimentos y bebidas con las codiciadas estrellas, aunque al principio solo se otorgaba una al restaurante que la mereciera. Cinco años más tarde se instauró la jerarquía de una, dos o tres estrellas.  

Las estrellas distinguen a los establecimientos, cualquiera que sea el tipo de cocina, que ofrecen la mejor calidad culinaria de acuerdo con los siguientes criterios: selección de los productos, creatividad, dominio de los puntos de cocción y de los sabores, relación calidad/precio y regularidad

Guía Michelin

Y este es su significado: 

Una estrella: una cocina de gran fineza. ¡Compensa pararse!

Dos estrellas: una cocina excepcional. ¡Merece la pena desviarse!

Tres estrellas: una cocina única. ¡Justifica el viaje!

Con el paso del tiempo la Guía Michelin fue integrando  otros reconocimientos a sus páginas, como el premio Bib Gourmand, inspirado en “Bibendum”, el muñeco Michelin. Esta mención se da a los establecimientos que sirven una cocina de calidad a precios asequibles. Y el “Plato Michelin” que identifica una cocina de calidad entre los restaurantes que no cuentan con estrellas.