
En el vasto archipiélago balear, Formentera aparece en el mapa como un oasis sereno de playas calmas. Y es que este es un destino que prefieren los viajeros por sus aguas cristalinas, arenas blancas y paisajes idílicos. Con tan solo 83 kilómetros cuadrados, esta isla se erige como un paraíso casi virgen, ofreciendo una escapada para aquellos que buscan alejarse del bullicio.
En este sentido, entre los tesoros más preciados de Formentera se encuentran sus playas. joyas costeras que rivalizan con las mejores del mundo. Desde calas escondidas hasta extensiones de arena interminables, cada rincón de esta isla mediterránea promete una experiencia única bajo el sol.
Las playas más lindas de Formentera

Formentera es sinónimo de playas paradisíacas, y no es difícil entender por qué. Con su costa bordeada por aguas turquesas y suaves arenales, esta isla balear se destaca para los amantes del sol y el mar. Este es un recorrido por las playas más espectaculares de Formentera, donde podrás disfrutar de la belleza natural en su máximo esplendor:
Playa de Ses Illetes
Considerada por muchos como una de las playas más hermosas del Mediterráneo, Ses Illetes deslumbra con su arena blanca y fina y sus aguas cristalinas que parecen pintadas a mano. Ubicada en el extremo norte de la isla, esta playa ofrece vistas impresionantes de los islotes cercanos y es el lugar ideal para nadar, tomar el sol o simplemente relajarse mientras se contempla el horizonte infinito.
Cala Saona
Situada en la costa oeste de Formentera, Cala Saona cautiva con su encanto natural y su ambiente tranquilo. Rodeada de acantilados rocosos y aguas azules, esta pequeña cala es perfecta para practicar snorkel y explorar el fascinante mundo submarino de la isla. Además, sus atardeceres pintorescos la convierten en un lugar privilegiado para disfrutar de momentos inolvidables.
Playa de Migjorn
Con sus seis kilómetros de extensión, la Playa de Migjorn es la más larga de Formentera y ofrece un paisaje diverso que va desde tramos de arena virgen hasta áreas equipadas con servicios para los visitantes. Aquí, los viajeros pueden encontrar el equilibrio perfecto entre la tranquilidad y la comodidad, disfrutando de largos paseos junto al mar o practicando deportes acuáticos como el windsurf y el kitesurf.
Cala en Baster
Escondida entre acantilados y rodeada de pinos, Cala en Baster es un remanso de paz en el corazón de Formentera. Aunque su acceso puede ser un poco más difícil que el de otras playas, la recompensa vale la pena: aguas cristalinas ideales para el buceo, paisajes naturales impresionantes y una atmósfera serena que invita a la contemplación y la relajación.
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Qué otras cosas hacer en Formentera

- Practica deportes acuáticos: aprovecha la oportunidad para practicar snorkel, buceo, windsurf o kitesurf en las aguas cristalinas que rodean la isla. Muchas playas ofrecen alquiler de equipos y clases para principiantes.
- Alquila una bicicleta o una moto: explora la isla a tu propio ritmo, disfrutando de los paisajes pintorescos y deteniéndote en lugares de interés a lo largo del camino.
- Visita el Faro de La Mola: Situado en el punto más alto de Formentera, el Faro de La Mola ofrece vistas espectaculares de la isla y el mar circundante.
- Disfruta de la gastronomía local: visita alguno de los restaurantes locales y prueba platos típicos como la ensalada payesa, el bullit de peix (guiso de pescado) o el flaó (postre tradicional). Además, asegúrate de probar el pescado fresco y mariscos de la región.
- Explora la Reserva Natural de Ses Salines: situada en el extremo sur de la isla, la Reserva Natural de Ses Salines es un área protegida que alberga una gran variedad de flora y fauna. Da un paseo por los senderos que atraviesan la reserva y admira la belleza natural de este entorno único.