
Cuando llega el invierno, el este de Canadá se viste de blanco y se convierte en un escenario mágico para viajeros en busca de experiencias únicas. Ontario y Quebec, dos de las provincias más emblemáticas de Canadá, ofrecen un sinfín de posibilidades para disfrutar y atreverse a vivir el invierno como nunca antes.
Tenemos una larga lista de razones para inspirarte a visitar estas regiones durante la temporada invernal, pero elegimos las tres principales que, estamos seguros, encenderán esa chispa para que sean tu próximo destino.

El invierno es motivo de fiesta
El este de Canadá celebra el invierno como ninguna otra región. Las festividades y eventos invernales transforman las ciudades en escenarios llenos de vida. En Ontario, algunos de los mejores se llevan a cabo en sus destinos más conocidos: las Cataratas del Niágara, Ottawa y Toronto.
En las Cataratas del Niágara, el Winter Festival of Lights consiste en instalaciones y shows de luces durante casi tres meses. Las cascadas se iluminan con fuegos artificiales por casi 40 noches y lo mejor es que el acceso ¡es gratis!
En la ciudad de Ottawa, también llamada ‘la capital canadiense de los festivales’, se realiza uno de los eventos más populares durante febrero: el Festival Winterlude, donde se encuentra la pista de hielo natural más grande del mundo, la zona de juegos Snowflake Kingdom para los más pequeños y exhibiciones de esculturas de hielo hechas por artistas de todo el mundo.
La ciudad más cosmopolita de Canadá, Toronto, es hogar del Winter Village en el Distillery District, el mercado navideño más popular de la ciudad, con un imponente árbol iluminado de 17 metros, grupos de villancicos y decenas de opciones de reconfortante comida, además del tradicional vino y chocolate caliente. Está abierto desde mediados de noviembre hasta la primera semana de enero.
Por otro lado, la provincia de Quebec no se queda atrás. En Montreal se lleva a cabo Montréal en Lumière, uno de los festivales invernales más grandes del mundo. De finales de febrero hasta principios de marzo, el Quartier des spectacles se vuelve el punto de encuentro para presenciar conciertos, degustaciones de sabores de todo el mundo, instalaciones de luces, una gran pista de hielo para patinar y eventos especiales como la Nuit Blanche, donde museos y otros espacios culturales se mantienen abiertos hasta tarde.
Finalmente, en la Ciudad de Quebec se realiza uno de los eventos más esperados del año, el Carnaval de Invierno de Quebec, que es la celebración invernal por excelencia y lo mejor de todo: es para todas las edades. Durante 18 días, comenzando en la última semana de enero, se realizan actividades para todos los gustos, desde emocionantes concursos de esculturas de hielo, carreras de canoas y trineos jalados por perros, hasta energizantes conciertos, desfiles nocturnos, paseos por el castillo de hielo y recorridos sobre carruajes con caballos. Además el anfitrión Bonhomme siempre está presente, quien es el personaje principal del evento y que este 2024 cumple su 70 aniversario.

Aventuras al aire libre
Para los amantes de la naturaleza y las emociones al aire libre, el este de Canadá es un paraíso durante el invierno. En Ontario, los Parques Nacionales y provinciales ofrecen una amplia variedad de tours invernales, desde pasear sobre bicis de llantas lo suficientemente grandes para rodar por la nieve entre los bosques nevados (fat biking), hasta hacer senderismo con raquetas de nieve para llegar a lugares inimaginables entre los mágicos paisajes nevados (snowshoeing). Puedes explorar el Parque Algonquin, ubicado entre Toronto y Ottawa, para disfrutar los sonidos del bosque nevado, donde te sentirás parte de una película, o el Parque Nacional Rouge, el primer parque urbano del país donde puedes hacer esquí de fondo sin salir del área de Toronto.
Si prefieres algo con más adrenalina, la provincia de Quebec tiene lo que buscas. Resorts como Mont Tremblant y Mont-Sainte-Anne ofrecen desafiantes pistas de esquí y snowboard tradicional, además de colinas adaptadas para hacer tubbing o sledding (deslizarte desde la cima sobre una dona inflable o un trineo, respectivamente). También puedes vivir la emoción de un recorrido sobre motos de nieve y paseos en trineos jalados por perros, al tiempo que disfrutas los imponentes paisajes boscosos totalmente nevados. Y en Mont Royal, un famoso parque en Montreal, puedes disfrutar de las pistas de hielo naturalmente congeladas para una sesión de patinaje.
Paisajes invernales
Desde el impresionante skyline de Toronto en Ontario, que en esta temporada se vuelve una postal blanca, hasta los mágicos rincones nevados de los Parques Nacionales como La Maurice en Quebec, los paisajes del este de Canadá durante el invierno son tan espectaculares que quitan el aliento.
Una de las vistas más imponentes es la de las Cataratas del Niágara en Ontario, que en los últimos años se han llegado a congelar por completo. También, ver el Canal Rideu en Ottawa convertirse en la pista de hielo más grande del mundo es una imagen que vale la pena guardar en la memoria. En la Ciudad de Quebec, la vista del Fairmont Château Frontenac desde la Dufferin Terrace parece sacada de una postal. Y si se trata de tomar fotos mentales, podríamos dedicarle un álbum entero al Hotel de Glâce, ubicado en la zona de Valcartier. Este hotel es el único en su tipo en todo el continente, ya que se construye cada año desde cero con toneladas de hielo y se decora con diferentes temáticas que inspiran espectaculares murales y esculturas. Tiene 30 habitaciones y suites, un bar, un espacio para celebrar bodas y hasta áreas comunes con resbaladillas.
Ya lo sabes. No importa si se trata de celebrar, disfrutar el invierno al aire libre o simplemente apreciar la vista, en Ontario y Quebec vivirás momentos inolvidables. Así que, prepara tu abrigo, tu cámara, tu espíritu aventurero y atrévete a vivir el invierno en Canadá. ¡Será un viaje que llevarás contigo para siempre!