Palisociety, reconocida por sus sofisticados hoteles boutique, ha expandido su portafolio con una nueva joya en la Tierra del Encanto: Arrive Albuquerque. Ubicado en el corazón de la ciudad, este hotel es una razón más para visitar la vibrante capital de Nuevo México.
Situado en Central Avenue, frente al Parque Robinson, en lo que fuera la legendaria Ruta 66, Arrive Albuquerque cuenta con 137 elegantes habitaciones distribuidas en seis pisos, una piscina de temporada con club de natación y un sofisticado bar-restaurante: Dwtnr Cocktail Bar & Lounge.
- Arrive Albuquerque, de la moderna marca hotelera Palisociety, ya está abierto y ubicado en el corazón de la capital de Nuevo México.
- El hotel de 137 habitaciones tiene un diseño elegante inspirado en el alto desierto: espere tonos terrosos, detalles en madera y divertidas luces colgantes.
- También hay un restaurante en el lugar, Dwtnr, Cocktail Bar & Lounge, especializado en cócteles artesanales y bocadillos ligeros.
El edificio, originalmente construido en 1965 como el Downtowner y más tarde conocido como Hotel Blue, se integró a la cartera de Palisociety en 2021 tras la adquisición de Arrive Hotel & Restaurants. Después de un meticuloso proceso de renovación, la propiedad renació con un diseño contemporáneo que inyecta nueva vida al centro de Albuquerque.
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«La ciudad está lista para un auge creativo», declaró Avi Broshand, director ejecutivo y fundador de Palisociety, en entrevista con Travel + Leisure. «Desde que trabajamos en este proyecto, hemos conocido a artistas, emprendedores y creadores fascinantes. Estamos emocionados por liderar la transformación del centro».
La fachada del hotel destaca por un impresionante mural de la artista local Nani Chacón, que evoca la obra de arte original del edificio y presenta un icónico lowrider rojo caramelo entre nopales en flor. En el interior, el diseño cálido y minimalista se inspira en los tonos del desierto alto de Nuevo México y en la estética orgánica de los años 70. Detalles en madera, lámparas colgantes, sillones acogedores y azulejos en tonos ocre, blanco y rojo ladrillo realzan los espacios comunes.
«Queríamos rendir homenaje a la ciudad y su esencia suroeste de manera auténtica y creativa, con ese toque irreverente que define a Arrive», comentó Broshand.
El hotel ofrece cuatro tipos de habitación: King, Doble, Suite y Accesible. Todas están decoradas con el sello excéntrico de la marca y equipadas con altavoces Victrola Bluetooth, minibares premium, batas de lujo y productos de baño Grown Alchemist. Además, los huéspedes tienen acceso a un gimnasio 24 horas y a la piscina Zia, con forma de sol.
Albuquerque está emergiendo como un destino gastronómico de primer nivel, con chefs locales como Kattia Rojas de Buen Provecho y Sean Sinclair de Level 5 en el Hotel Chaco, reconocidos en la lista de semifinalistas del premio James Beard. Sin embargo, los huéspedes de Arrive no tienen que alejarse del hotel para disfrutar de una excelente oferta culinaria. Dwtnr Cocktail Lounge & Bar presenta un menú de comfort food con influencias asiático-estadounidenses, donde destacan la tostada de camarón con coco y aderezo tom yum, los smashburgers de chile verde y las costillas char siu. El bar, por su parte, ofrece cócteles innovadores como el Rhinestone Cowboy (licor de yuzu, sake espumoso y champán) o el Eastbound & Down (ginebra y jugo de toronja).
Las tarifas por noche en Arrive Albuquerque comienzan en $185 USD, ofreciendo una experiencia única en un entorno vibrante y en constante evolución.
