Cuando la mayoría de las personas piensa en destinos de esquí en Estados Unidos, automáticamente imagina las Montañas Rocosas o el Noreste; pocos consideran el sur. Pero pasar por alto el sur es ignorar a Boone, Carolina del Norte, conocida como la «Capital del Esquí del Sur».
Esta ciudad de Carolina del Norte se llama «la Sedona del Sur». Este es el motivo
Boone no solo ofrece tres estaciones de esquí cercanas —cada una a menos de 20 millas de la otra—, sino que también es un destino en sí mismo. La ciudad se encuentra justo al lado de la Blue Ridge Parkway, apodada «La Carretera Favorita de Estados Unidos», que se extiende por 469 millas a través de los Montes Apalaches y regala vistas panorámicas que se transforman en un paraíso invernal cuando baja la temperatura.
La estación más cercana al centro de Boone es Appalachian Ski Mountain, la más antigua de las tres. Fundada en 1962, esta montaña cuenta con 13 pistas abiertas para esquí nocturno, una pista de hielo al aire libre y la French Swiss Ski College, que ha enseñado a esquiar a generaciones de visitantes. Además, está a un paso de la animada ciudad de Blowing Rock.
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Sugar Mountain Resort, la estación más grande y empinada, ofrece 51 hectáreas de terreno esquiable, 21 pistas y un desnivel de 365 metros. Sus 14 pistas iluminadas permiten esquiar de noche, y muy cerca se encuentra Hawksnest Tubing, el parque de tubing en nieve más grande del sureste, con más de 30 carriles.
Por último, Beech Mountain Ski Resort se distingue por ser el punto más alto de la zona y de todo el este de EEUU, con 17 pistas, seis telesillas y un desnivel de 250 metros. Para el après-ski, Beech Mountain Brewing Co. y el Sky Bar, en la cima a 1,670 metros, son paradas obligatorias.
Pero Boone no es solo esquí y snowboard. La ciudad también presume de una comunidad vibrante de pequeños empresarios. Por ejemplo, Fred y Margie Pfohl, quienes se conocieron en las pistas, ahora son dueños de Fred’s General Mercantile, al pie de Beech Mountain. Para explorar el arte y la artesanía local, recorre las Blue Ridge Craft Trails, con paradas en lugares como Hands Gallery y Capozzoli Guitar Company, donde la madera recuperada y los elementos ferroviarios se transforman en muebles y guitarras únicas. Para comer, The Gamekeeper, un asador especializado en carnes de caza locales, es un favorito indiscutible.
Aunque conducir por la Blue Ridge Parkway es la ruta más escénica hacia Boone, quienes vienen de más lejos pueden volar al Charlotte Douglas International Airport (CLT) y tomar el autobús Hickory Hop hasta la ciudad
