
No hace falta una maquina del tiempo para volver atrás en la historia y dejarse envolver por la atmósfera de tiempos pasados, cuando existe Puertomingalvo. Este pueblito medieval amurallado que se esconde en la provincia de Teruel, Aragón conserva su diseño arquitectónico medieval que le valió el reconocimiento como uno de «Los Pueblos más Bonitos de España» desde el año 2013.
Bien metido en el corazón del Parque Cultural del Maestrazgo, esta localidad invita a los viajeros a explorar sus calles empedradas y descubrir los secretos que guardan sus imponentes construcciones. Todo, a tan solo 2 horas de la ciudad de Valencia.
Recorre Puertomingalvo, un pueblito medieval amurallado de Teruel

Puertomingalvo, una joya arquitectónica que resistió muy bien la prueba del tiempo, se yergue majestuosa entre las montañas. Desde el momento en que se atraviesa el Portal Alto, uno de los dos portales de acceso a este pueblito medieval amurallado, se siente como si el tiempo se detuviera.
Tal como lo recomienda el Ayuntamiento de Puertomingalvo en su portal oficial, un imperdible turístico es el Castillo de Puertomingalvo. Esta construcción se alza como un guardián silencioso, recordando la importancia estratégica de esta localidad en tiempos pasados. Construido en el siglo XII, aunque se cree que sus orígenes se remontan al siglo X, este imponente castillo medieval es una obra maestra de la ingeniería militar de la época.
Su diseño pentagonal, construido sobre la roca para aprovechar el relieve natural, lo convierte en una fortaleza prácticamente inexpugnable. Aunque solo quedan restos de algunas de sus construcciones interiores, como el gran salón y los establos, la Torre del Homenaje se erige como verdadera protagonista, desafiando el paso del tiempo con su robusta presencia.
Así, adentrarse en el casco antiguo de Puertomingalvo mucho mejor que viajar en una máquina del tiempo. Las estrechas calles empedradas, flanqueadas por casonas de piedra con grandes portales, invitan a los visitantes a perderse en su encanto medieval. Cada rincón guarda un tesoro arquitectónico, como el edificio de Sant María de Gracia, un antiguo hospital para niños del siglo XV que hoy alberga la escuela local.
Más allá de las murallas de Puertomingalvo

Aunque el pueblito medieval amurallado de Puertomingalvo es una atracción por sí mismo, sus alrededores ofrecen una variedad de oportunidades para los amantes de la naturaleza y la aventura. Las ermitas medievales de San Bernabé y Santa Bárbara, ubicadas en las afueras, brindan la oportunidad de disfrutar de la tranquilidad y de paisajes mediterráneos de ensueño.
Por otro lado, la Iglesia de la Virgen de la Purificación y San Blas, construida en el siglo XIV y ampliada en el XVIII, es otro de los puntos de interés imprescindibles. Su estilo gótico original, combinado con elementos neobarrocos posteriores, crea una fusión arquitectónica cautivadora.
Además, los senderos que rodean Puertomingalvo son ideales para practicar senderismo y descubrir tesoros arqueológicos, como los restos de un poblado íbero cerca de la ermita de San Bernabé o las estelas romanas y huellas de dinosaurio que salpican la región.
Cómo llegar a Puertomingalvo desde Valencia
Para llegar a este bellísimo pueblo medieval, es necesario tomarse apenas poco más de 2 horas desde Valencia en un viaje que, de seguro, responderá a las expectativas de quienes lo hagan.