En la pintoresca Costa Brava de Cataluña, se encuentra el encantador pueblo de Tossa de Mar, un lugar que parece sacado de un cuento de hadas. Con sus impresionantes murallas y sus cautiva a todos los que tienen la suerte de visitarlo. Sus protagonistas, son sin dudas sus murallas.
Tossa de Mar, también conocida como Tossa, pertenece a la comarca de la Selva y cuenta con una pequeña población de alrededor de 6.206 habitantes. Su ubicación en la Costa Brava le brinda un entorno natural espectacular, con acantilados, pinares, calas y playas que enamoran a primera vista.
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Tossa de Mar, un pueblo en Costa Brava lleno de murallas y bellas playas
Desde la época romana, cuando se conocía como Turissa, Tossa de Mar fue un lugar de interés histórico y artístico. Marc Chagall la llamó el «Paraíso Azul» después de pasar dos veranos allí en la década de 1930. Además, películas como «Pandora y el holandés errante» y «Préstemela esta noche» inmortalizaron la belleza de este pueblo en la pantalla grande.
Tossa de Mar ofrece una variedad de lugares interesantes para visitar. La muralla medieval, construida entre los siglos XII y XIII, es una de las grandes atracciones, al igual que el faro de Tossa, ubicado en lo alto de la colina donde antes se encontraba un castillo. El museo municipal ofrece una mirada fascinante a la historia y la arqueología de la región.
A su vez, caminar por las estrechas calles de Tossa de Mar es una experiencia encantadora, con tiendas, cafés y restaurantes que invitan a descubrir sus encantos. Por ejemplo, la Calle dels Socors, la más animada del pueblo, es perfecta para disfrutar de la vida local y comprar souvenirs.
Además, las playas y calas -pequeñas ensenadas- de la zona son verdaderos paraísos naturales, ideales para practicar deportes acuáticos como el buceo y el snorkel. Por su parte, la playa Gran, en el centro del pueblo, es la más conocida, pero las calas escondidas también tienen su encanto.
Cómo dato de color, Tossa de Mar tuvo el honor de ser la primera ciudad española en declararse antitaurina en 1990, un ejemplo seguido por muchas otras en Cataluña.
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Qué descubrir en Tossa del Mar
No te puedes ir de este pueblo de Costa Brava sin probar su gastronomía. Con platos como el famoso «Simitomba», una delicia a base de pescado fresco y sabrosas especias. Cada año, durante el mes de septiembre, se celebra una campaña gastronómica en torno a este plato tradicional, en la que participan quince restaurantes locales.
Desde el Camino de Ronda, con sus impresionantes vistas al mar, hasta el Castillo de Tossa de Mar, que ofrece una panorámica espectacular de la ciudad, hay mucho que explorar en este hermoso pueblo de la Costa Brava.
Por último, Vila Vella es otro icono de Tossa de Mar, con su imponente castillo que se alza sobre el mar. Este barrio medieval es una maravilla de calles empedradas y murallas de piedra que protegen el casco antiguo. Dentro de la muralla se encuentra la pintoresca capilla de la Mare de Deu dels Socors, construida según la leyenda por un pescador que sobrevivió a un naufragio.
