
Martha Stewart también tiene un destino favorito de viaje, como cualquier mortal. La diferencia es que también jura que no volverá… al mismo lugar. Sí, tal cual.
Durante un evento reciente para lanzar las Dream Dinners de Resy —una serie de cenas que reúne chefs con sus colaboradores soñados—, Stewart le contó a People que su destino favorito en el mundo es, sin pensarlo dos veces, Japón. Y como era de esperarse, el amor es gracias a la comida.
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«Probablemente podría comer tartar de pescado todos los días», dijo. «Solo cambiaría el tipo de pescado: platija, lenguado, atún, merluza… cualquier cosa ultra fresca. Estaría buenísimo». Y con eso, ya estamos reservando vuelo.
Pero, sorpresa: también dijo que probablemente no regresaría nunca a Japón. ¿La razón? No es por el sushi ni por el jet lag, sino por su propia filosofía de viaje.
«Ya no vuelvo a ningún sitio», explicó Stewart. «Todavía tengo tantos lugares por conocer que no me gusta repetir. Aunque sí tengo un viaje a Sídney pronto (y ya he estado antes), esta vez lo convertiré en una aventura diferente».
Eso sí, Martha no es nueva en esto de compartir sus hacks de viaje. En 2024, contó a Travel + Leisure que su truco infalible es contratar un recepcionista en el aeropuerto, incluso si viaja en clase turista. “Vale totalmente la pena”, aseguró. “Hace todo más fácil, y siempre viajo con más gente. Nos emociona a todos”.
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También confesó una tradición curiosa: en casi todos sus vuelos lleva naipes para jugar cartas. Y por supuesto, los snacks a bordo no son cualquier cosa. “Llevo yogur casero, y si es un viaje largo, también una lata de caviar y un brioche”. Porque claramente no es lo mismo viajar a Japón que sobrevivir a un vuelo con papitas rancias.