Los atractivos de Nova Gorica‑Gorizia, la primera ciudad transfronteriza europea
Vista aérea del río Solkan, al lado de la ciudad. - Belus / iStock

Situada en la frontera entre Italia y Eslovenia, la región de Nova Gorica-Gorizia es un caso singular en Europa: dos ciudades-gemelas que comparten urbanismo, cultura, historia —y desde 2025, también el título de Capital Europea de la Cultura. Esta condición las convierte en un símbolo palpable del ideal europeo de unidad más allá de los límites nacionales.

Una ciudad sin fronteras… literalmente

En la céntrica plaza conocida como Piazza Transalpina (en italiano) o Trg Evrope (en esloveno), el visitante puede estar con un pie en Italia (Gorizia) y otro en Eslovenia (Nova Gorica). Este espacio, símbolo de integración y de los tiempos en que la línea divisoria era una barrera, ha sido renovado para reflejar una Europa sin muros.

frontera-gorizia-1000x667 - Los atractivos de Nova Gorica‑Gorizia, la primera ciudad transfronteriza europea
Placa que señala la frontera entre los dos países. – Belus – iStock

Patrimonio histórico y mezcla cultural

Gorizia, con su castillo medieval que domina la colina, remonta su historia a la Edad Media mientras que Nova Gorica —creada tras la Segunda Guerra Mundial para dar espacio al lado yugoslavo de la frontera— presenta un urbanismo moderno y socialista. Esta dualidad se convierte en una curiosidad para los viajeros interesados en la historia europea del siglo XX.

Naturaleza y valles interiores junto al Adriático

Desde la región se accede al río Solkan, famoso por sus aguas color esmeralda, sus rutas de senderismo y puentes históricos como uno de los arcos de piedra ferroviarios más impresionantes del mundo. En las laderas, la campiña de Brda (Eslovenia) y la de los valles cercanos ofrecen paseos entre viñedos, miradores y pequeños pueblos que saben a vino y tradición.

Enoturismo y gastronomía frontera-a-frontera

La región junto a Nova Gorica es un escenario ideal para el enoturismo. Brda produce algunos de los vinos eslovenos más premiados, y en Gorizia también se valora la tradición vitícola. Cada año se celebra el festival gastronómico Gusti di Frontiera / Okusi ob Meji en el que se mezclan sabores de Italia, Eslovenia y más allá. Los mercados locales ofrecen “osmice”, pequeñas tabernas rurales donde se degusta vino, embutidos y productos autóctonos; una experiencia auténtica de la vida tradicional.

puente-ferroviario-gorizia-1-1000x750 - Los atractivos de Nova Gorica‑Gorizia, la primera ciudad transfronteriza europea

Cultura y creatividad transfronteriza

La capitalidad cultural transfronteriza de 2025 —bajo el lema “GO! Borderless”— plantea una programación que incluye música, teatro, arte urbano, ecología y diseño en ambas ciudades. Esta iniciativa representa un experimento de cooperación europea poco habitual, ideal para quienes buscan destinos originales con componente artístico y social.

Cuándo visitar y qué época elegir

La mejor época para visitar Nova Gorica-Gorizia es primavera (abril-mayo) o otoño (septiembre-octubre). En primavera el clima es templado y los valles de Brda florecen. En otoño, se desarrolla la vendimia y los tonos dorados invaden los paisajes, además de celebrarse el festival gastronómico. Durante el verano, aunque las temperaturas suben, la cercanía del mar Adriático y los valles de montaña permiten combinar playa y montaña. El invierno es más tranquilo: ideal para escapadas culturales y disfrutar de la cocina sin multitudes.

Turismo urbano combinado con escapadas rurales

Si te alojas en Nova Gorica-Gorizia, puedes dedicar un día al centro urbano donde confluyen tiendas, cafés y arquitectura de estilo austro-húngaro en Gorizia, y luego escaparte a la zona de Brda para una tarde entre viñas o al río Solkan para una actividad al aire libre. Esta combinación de ciudad más naturaleza es lo que hace de esta región un destino diferencial.

nova-gorica-1-1000x667 - Los atractivos de Nova Gorica‑Gorizia, la primera ciudad transfronteriza europea
Vista del lado esloveno (Nova Gorica) desde el castillo de Gorizia. – Haidamac – iStock

Movilidad y acceso fácil

Desde Italia: se puede llegar en tren a Gorizia, o desde Trieste. Desde Eslovenia: Nova Gorica conecta con otras ciudades en la región de Goriška. Una vez allí, cruzar la frontera entre Italia y Eslovenia es tan sencillo como dar un paso en la plaza Transalpina. La región también ofrece rutas de bicicleta entre viñedos y senderos que cruzan los límites nacionales, lo que refuerza el espíritu de unas vacaciones sin fronteras.