A 65 kilómetros de Pamplona se encuentra Maya, un bonito pueblo de una sola calle y que tiene hermosas casitas que parecen de cuento, ideal para visitar en una escapada y descubrir un destino maravilloso.
Dentro de la Comunidad Foral de Navarra, ubicado en el Valle del Baztán, en la Merindad de Pamplona y a 280 metros sobre el nivel del mar, casi todas las bellas casas, casonas y palacios que la componen se ubican de forma alineada casi perfecta y paralelamente a lo largo de su alargada calle principal, en una cuesta que proviene del monte.
Este pueblo de solo 200 habitantes cuenta con una gran historia ya que fue el último punto de la resistencia del Reino de Navarra contra la conquista del Reino de Castilla, y desde 1969 dejó de ser un municipio independiente para pasar a ser uno de los pueblos del Valle de Baztán.
Así es el bonito pueblo de Maya a 1 hora de Pamplona
En el pueblo de Maya, que se encuentra ubicado en la falda del Monte Gaztelu, todo se resume en la extensión de una sola calle donde tanto sus hermosas viviendas como sus antiguos palacios confluyen. Alineados y en paralelo a esta particular vía, se puede ir descubriendo entre las casitas que parecen salidas de cuentos, el Palacio Arretxea, el Palacio Borda o la Casa Arriada. Es un lugar de paso del Camino de Santiago y allí también se puede conocer la Iglesia de la Asunción de origen medieval.
Un punto que también es muy atractivo y característico es el arco porticado de medio punto que se encuentra en la entrada de este bello pueblo donde a unos metros se ubica el Molino de Amaiur, donde se produce harina desde el siglo XVIII hasta hoy y donde se puede degustar los más ricos y famosos talos.
A muy pocos minutos de allí se encuentra el Puerto de Otsondo desde donde se puede apreciar la magnífica vista panorámica que ofrece Maya. Mientras que desde el castillo del pueblo se puede ver la cima del Monte Gorramendi que se encuentra a unos 20 minutos del lugar.
Descubrir las maravillas del pueblo de Maya
Entre todas las bellezas que forman parte del pueblo de Maya, uno de los más importantes es su castillo. Si bien sólo quedan algunos restos y un monolito levantado sobre sus cimientos, en honor a las tropas navarras que defendieron la población frente a las tropas castellanas en el año 1522, se lo puede conocer a través de visitas guiadas. Las más hermosas vistas proporciona esta maravilla arquitectónica, ya que para acceder al Castillo de Amaiur se debe subir a una cuesta más que empinada.
En este pueblo que cuenta con mucha historia, aún se siguen realizando excavaciones arqueológicas para encontrar más restos de su pasado y profundizar sobre la magnífica historia de este lugar. Además, son muy famosas sus fiestas patronales por los concursos de perros pastor.
Cruzar el arco que enmarca la entrada de este pueblo es ingresar a un mundo que parece de fantasía. Sus pintorescas casas con anchos aleros, con hermosas balconadas, bien decoradas, son el ingreso a un cuento para nunca olvidar y que se querrá contar por siempre.
