Para quienes buscan escapar del bullicio con sus parejas mientras se rodean de la auténtica vida yucateca, no hay mejor opción que el Pueblo Mágico de Espita. Se trata de un lugar escondido a corta distancia de la paradisíaca Riviera Maya, situado estratégicamente a 180 km de Cancún.
Caminar tomado de la mano de tu ser amado por callejuelas orladas de antiguas casonas de brillantes colores y respirar la tranquilidad de una vida más sencilla es posible en Espita. Y es que en este Pueblo Mágico, cada metro caminado rebosa de herencia cultural. Esta joya arquitectónica y geográfica, es apodada la «Atenas de Yucatán».
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Espita, el Pueblo Mágico cerca de Cancún ideal para pasear en pareja
Espita es una pequeña localidad ubicada en el municipio de Valladolid, en el estado de Yucatán, México. Se encuentra a unos 20 kilómetros al sur de la ciudad de Valladolid y a unos 100 kilómetros al este de la ciudad de Mérida. Se fundó en el siglo XVI por los colonizadores españoles. ¿Su nombre? Se debe a la presencia de una pequeña imagen religiosa que fue encontrada en la zona. Así, esta última fue considerada milagrosa y atrajo a muchos peregrinos a la localidad.
Nada más cruzan el arco que da la bienvenida al centro histórico, los visitantes se ven transportados a una época remota. Allí yace la imponente Iglesia de San José, una impresionante construcción de estilo franciscano que data del siglo XVII. Sus altas torres y fachada son admirables.
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Justo enfrente, el mercado municipal Juan José Méndez rebosa por sus colores, aromas y sabores típicos de la región. Aquí las hábiles manos de los lugareños tejen bordados o trenzas las famosas canastas de bejuco, cuidadosamente preservando las artesanías que se han transmitido de generación en generación.
Otro imperdible es el Palacio Municipal, con su torre y reloj público. Este emblemático edificio, construcción del siglo XIX, es el testimonio vivo del esplendor que alguna vez inundó las calles de Espita. Si uno sigue caminando, descubrirá otras joyas arquitectónicas como la antigua Estación de Ferrocarriles, hoy convertida en Casa de la Cultura, o el emblemático edificio de la Sociedad Progreso y Recreo.
Además, hermosos son los parques que rodean a estos edificios, como el Melchor Ocampo. Estos son ideales para descansar, leer un libro o llevar a los niños a jugar.
Qué más se puede hacer en Espita
En Espita lo mejor es arrancar el día con un desayuno de exquisitos antojitos yucatecos como huevos motuleños o salbutes. Es necesario recargar energías porque las calles del centro histórico de Espita son un auténtico museo al aire libre donde cada edificio parece tener una historia que contar.
Tampoco se puede dejar pasar de largo las imponentes haciendas que rodean Espita. Estas antiquísimas fincas rústicas brindan un asombroso vistazo al pasado, cuando la producción de caña de azúcar y aguardiente convirtió a este Pueblo Mágico cerca de Cancún en un emporio económico de gran importancia para la región.
Por último, tras recorrer los campos que alguna vez fueron prósperos cañaverales, uno se puede hospedar en lujosas haciendas reconvertidas como Kankabá y Santa Cruz Regadío. Aquí se pueden encontrar antiguas alcobas con altos techos de vigas y piedra o, una alberca de aguas cristalinas enmarcada por impresionantes arcos de cal y cantera.
Cómo llegar a Espita desde Cancún
Se tarda 2 horas y 25 minutos en llegar a Espita desde Cancún en coche por la carretera Cancun-Kantunil/México 180D.
