
Con su arquitectura tradicional y un entorno natural exuberante, el pueblito La Cumbrecita regala a los turistas una experiencia despojada de lo material. Es que este lugar es tan pequeño que muchos servicios de las grandes ciudades no se encuentran allí.
Anidado en las sierras de la provincia de Córdoba, en Argentina, este pintoresco pueblito es la escapada justa para relajarse en las próximas vacaciones. Con calles adoquinadas y cabañas de montaña, La Cumbrecita es un lugar único a tan solo unas horas de la bulliciosa ciudad de Córdoba.
El pueblito de Córdoba ideal para descansar y olvidarse de los autos
La Cumbrecita es conocida por ser el único pueblo peatonal de Argentina. Al llegar, uno debe dejar su auto en un estacionamiento en las afueras del pueblo, para luego recorrerlo a pie. Es uno de los destinos más populares de las sierras cordobesas, ya que ofrece alojamiento en medio de un bosque repleto de pinos, aire puro y calles libres de contaminación.

La Cumbrecita se ubica a 118 kilómetros de la capital de Córdoba, por lo que debes planificar bien qué llevarás a este hermoso pueblito, ya que son pocos los negocios disponibles. El ayuntamiento aclara que dentro del lugar no hay servicios de carga de combustible ni tampoco cajeros bancarios para retirar dinero.
Qué hacer en La Cumbrecita en un día
La localidad de La Cumbrecita alberga una población permanente de alrededor de 1300 habitantes, pero cuenta con una infraestructura adecuada para recibir a más de 360 mil visitantes anuales que llegan al lugar para disfrutar sus vacaciones.
Una de las perlas de La Cumbrecita son sus bosques de pino y cascadas, donde los turistas practican senderismo. Luego, para refrescar la travesía, muchos descienden a los cursos de agua del pueblo para darse un baño al costado del río.
Otra de las cosas que se pueden hacer visitando La Cumbrecita en un día es degustar comidas típicas del lugar como es el goulash con spatzle, salchichas alemanas o tortas caseras en alguno de sus restaurantes más afamados.

Por último, la ciudad peatonal contiene aún sus primeras edificaciones, los primeros hogares construidos por las personas que vivieron allí en sus comienzos; así como la capilla histórica del pueblo. El camino puede terminar con una taza de té y una porción de torta en la casa de Tante Liesbeth, una antigua ama de llaves del lugar.
Todo lo que necesitas saber para ir a La Cumbrecita
Cabe recordar que, como La Cumbrecita es un pueblo peatonal alejado de las grandes urbes, es necesario que tengas en cuenta los siguientes detalles antes de visitar el pueblo cordobés:
- Usar calzado cómodo, sus destinos están pensados para ser recorridos a pie
- Llevar abrigo, lentes de sol y protector solar debido al inestable clima
- Llevar dinero en efectivo
Por último, en La Cumbrecita está prohibido cazar y dañar el lugar. Por lo que, si alguien es encontrado dañando la flora y fauna protegida del pueblo, será multado según lo marca la ley municipal.