
Al planear nuestras vacaciones elegimos un destino, compramos los boletos de avión con anticipación, pasamos horas cazando los hoteles con las mejores tarifas y diseñamos nuestro itinerario de forma milimétrica. No obstante, muchas personas se olvidan de contratar un seguro de viajes, un elemento clave en la valija de todo viajero.
Todo puede cambiar en cuestión de segundos y, aunque aparentan ser un gasto innecesario, las pólizas de viaje son la cura para ese sentimiento de inseguridad que solemos experimentar el día antes de abordar el avión. A veces pueden ser difíciles de elegir, pero hay que hacer un esfuerzo para comprender la letra pequeña. El quid de la cuestión está en saber qué hay que tener en cuenta al contratar este tipo de servicio.
No te vayas sin seguro de viajes: te contamos por qué
Busca una cobertura amplia
No todos los seguros de viaje son iguales. Si bien la gran mayoría de los productos que se encuentran en el mercado cubren contratiempos sencillos como el robo de una tarjeta de crédito, no siempre son las opciones más completas.
Lo mejor es hacer una investigación minuciosa para saber qué ofrece cada compañía en caso de que seas protagonista de un episodio médico de gran envergadura como una fractura de cadera, un ataque cardiovascular o problemas respiratorios.
Esta también es la oportunidad perfecta para explorar las cláusulas adicionales. Este punto es especialmente importante si piensas incluir artículos costosos en tu valija… Por ejemplo, el collar de diamantes que te regalaron por tu compromiso, cámaras fotográficas profesionales o el equipo de esquí de papá.

Opta por un proveedor de confianza
Antes de siquiera pagar, investiga sobre los proveedores disponibles en tu lugar de residencia. Busca en internet y aprovecha el poder de las redes sociales para conocer la experiencia de otras personas.
Concéntrate en la experiencia de aquellos que se vieron en la necesidad de utilizar el servicio y, sobre todo, de quienes tuvieron que atravesar el proceso de reclamos. Este último detalle es el más importante; no hay nada más frustrante que pasar meses exigiendo el pago de un dinero que gastaste hace mucho.
Conoce los países más seguros para viajar en 2024
¿Qué hacer cuando hay condiciones preexistentes?
Las aseguradoras son un negocio. Por lo tanto, hay que aceptar que no suelen estar interesadas en incluir a personas con enfermedades crónicas o preexistentes entre su clientela.
Sin embargo, esto no significa que el abuelo no pueda viajar. Al contrario, existen muchas alternativas de donde elegir, pero hay que ser paciente y estar dispuesto a avanzar con mucho cuidado por dos razones:
- Cualquier contratiempo puede afectar gravemente la salud de quienes sufren de, por ejemplo, diabetes, lupus o distintos tipos de cáncer. A veces un dolor momentáneo puede convertirse en una desgracia por varias semanas.
- Es probable que las compañías que tengas en tu radar cuenten con su propia definición de “condición preexistente”.
Por ejemplo, para Allianz esta frase hace referencia a cualquier lesión o padecimiento que, “dentro de los 120 días anteriores e incluyendo la fecha de compra” de la póliza, haya impulsado la búsqueda de “un examen, diagnóstico, atención o tratamiento médico” o “haya requerido la toma de medicamentos recetados por un médico”.
De manera similar, Bupa aclara que el término incluye “todas las enfermedades y condiciones, conocidas o no por el asegurado, que hayan presentado síntomas y/o para las cuales el asegurado haya sido hospitalizado, tratado por un especialista o recibido un tratamiento médico antes de la fecha de comienzo del seguro”.
En este caso sería conveniente ser honestos sobre la condición física, ya que, por lo general, cualquier dato omitido puede causar la anulación de los seguros de viaje… Y nadie quiere estar en el medio del Mar Caribe sintiendo dolor.
Los seguros de viaje… ¿Solo o en grupo?

¿Estás planeando un solo travel por el sudeste asiático? O, por el contrario, ¿vas a ir a Los Cabos con toda tu familia para celebrar el aniversario de tus padres? Estos detalles son relevantes a la hora de contratar el seguro porque te permitirá decidir si prefieres pagar por un servicio personalizado o compartir el gasto con tus acompañantes.
Como su nombre lo indica, las pólizas individuales se adaptan más fácilmente a los objetivos y las necesidades de una sola persona. Las grupales, cuyos integrantes pueden estar relacionados o no, son perfectas para ahorrar dinero y tiempo antes, durante y después de viajar.
En definitiva, no hay que ver los seguros de viajes como un gasto, sino como una inversión. Sí, pronto estarás añadiendo una línea extra a tu lista de quehaceres después de adentrarte en este mundo. A pesar de ello, irse de vacaciones sin dejar cabos sueltos te permitirá enfocarte en disfrutar y descansar.