«NO HURRY, NO WORRY,» proclama un letrero pintado a mano en el camino hacia Punakha, un valle con matices tropicales en el corazón de Bután. Es una descripción adecuada para esta antigua capital, donde, incluso para los estándares ya relajados de Bután, la vida parece desacelerarse a un ritmo aún más lento.
He realizado tres viajes por Bután, y Punakha se ha convertido en uno de mis valles butaneses favoritos por una buena razón: el Punakha dzong, una fortaleza encalada encajada entre dos ríos, es una de las más antiguas y bonitas del reino. Y gracias a su clima templado durante todo el año, Punakha es uno de los pocos lugares en Bután donde los complejos turísticos cuentan con piscinas al aire libre, un beneficio que se agradece después de un largo día visitando templos por el campo circundante.
&Beyond Punakha River Lodge, Bután
- Con solo seis suites con tiendas y dos villas aptas para familias, el campamento se siente encantadoramente íntimo.
- Los baños en las suites con tiendas cuentan con un tragaluz en su techo cubierto de bambú, lo que los hace perfectos para observar las estrellas desde un relajante baño de hierbas en noches despejadas.
- Los carritos emergentes de cocteles, cenas a la luz de las velas y excursiones están incluidos en la tarifa, por lo que no hay necesidad de preocuparse por sorpresas en la factura.
- Una de las stupas más bonitas de Bután, la Khamsum Yuelley Namgyal Chorten, es visible desde el restaurante y está a solo 40 minutos a pie.
No sorprende entonces que la empresa de hospitalidad de lujo y operador turístico &Beyond haya establecido recientemente su primer campamento butanés en una curva del río entre los campos de arroz de Punakha. «Las vistas son hermosas, pero Punakha también está lo suficientemente bien ubicado para que podamos operar excursiones a diversas áreas como Gangtey, Gasa y Laya», dice Rishi Sarma, el gerente general de andBeyond Punakha River Lodge. «Es un destino rico en actividades con numerosas caminatas, rafting, ciclismo de montaña y pesca. Y, con su proximidad a los pandas rojos y leopardos de las nieves, podemos enfocarnos en los esfuerzos de conservación de la vida silvestre por los que &Beyond es conocido.»
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Alerta de spoiler: deja de leer si ya estás planeando una visita, porque Namgay, el gerente de experiencia del campamento, tiene muchas sorpresas bajo sus mangas a cuadros. Una mañana cálida, cuando llegué a la stupa Khamsum Yuelley Namgyal Chorten, después de una caminata cuesta arriba de 40 minutos, él y su equipo me esperaban con un desayuno de picnic de jugos frescos, hojaldres y café con Amarula. Otro día, después de terminar un recorrido por el Punakha dzong, cuando el sol comenzó a ponerse detrás de las montañas, apareció con un bar emergente de cocteles en una orilla cercana del río: G&T helados, mini quiches, jalapeños rellenos de queso y más.
Las habitaciones
Como especialistas en campamentos de safari con tiendas en África, no sorprende que &Beyond haya elegido una configuración similar para su primera sucursal asiática. «La idea era traer el verdadero Bhután», dice Sarma. «Necesitaba sentirse salvaje y no demasiado cuidado. Las tiendas se prestan bien para esta inmersión en la naturaleza, sin dejar una huella pesada en la tierra.»
Me alojé en una de las seis suites con tiendas, que era, de hecho, más parecida a una villa tipo tienda. Instalada en un marco de madera tradicional de Bután, el área del dormitorio tenía un techo de lona y ventanas que se extendían por toda la pared y podían abrirse con cremallera para dejar entrar el exterior.
La decoración solo se podría describir como chic butanés: una mezcla de madera y bambú, con toques de ante azul («inspirado en la amapola azul, la flor nacional de Bután», según Sarma), pinceladas de latón y alfombras vintage que añadían un toque de color. Me gustó especialmente la cabecera de mi cama, que estaba cubierta con telas locales caleidoscópicas hechas por Renew, una organización sin fines de lucro con sede en Thimphu que ayuda a las mujeres de Bután a aprender nuevas habilidades (en este caso, tejido) para generar ingresos.
El baño privado prescindió de las paredes de lona en favor de pizarra gris y piedra apilada. Había una ducha al aire libre para los días cálidos de verano (además de una espaciosa en el interior) y una bañera con revestimiento de latón ubicada justo debajo de un tragaluz en el techo de bambú para observar las estrellas en noches despejadas.
Para obtener más espacio, está la Casa del Río, una villa de dos niveles construida como una granja tradicional en uno de los lugares más encantadores de la propiedad. Desde la piscina en su terraza (o la bañera cerca de la ventana en el piso de arriba), puedes ver pasar el río y las cumbres del Himalaya en el horizonte. Rodeada de hierbas altas más atrás en la propiedad, la Suite Familiar es aún más grande y cuenta con dos habitaciones separadas por una sala de estar y comedor, junto con una amplia piscina privada y varias terrazas llenas de almohadones.
Comida y bebida
El vestíbulo fluye hacia el único restaurante del campamento, pero durante mi estancia de cuatro noches, solo cené allí una vez (porque llovió). En cambio, el equipo había preparado mi mesa en un lugar diferente de la propiedad cada noche, cerca de la hoguera, en el huerto de cítricos o en un lugar bonito a lo largo del río.
Dirigido por el afable chef sudafricano Rudolf van der Westhuizen, el equipo de cocina utiliza ingredientes locales para diseñar un nuevo menú cada noche, que incluyó, durante mi visita, ramen de pollo, curry de ternera y ceviche de trucha del Himalaya. También se pusieron creativos con la comida butanesa: aparte de una brillante cena con mis platos butaneses clásicos favoritos (entre ellos, las patatas kewa datshi y el queso), que solicité una noche, algunos menús incluían giros juguetones en alimentos reconfortantes locales como momos (dumplings) con manzana y bocados similares a arancini rellenos de ema datshi (chile y queso).
Experiencias y amenidades
El campamento cuenta con una piscina rodeada de camastros y salas de yoga cubiertas como al aire libre con vistas a los campos de arroz. Aunque son encantadoras, son las actividades fuera del campamento donde &Beyond realmente brilla, ya que, después de todo, es para eso que vienes a Punakha. Por supuesto, hay visitas guiadas al hermoso dzong, pero también hay visitas a templos y conventos que pocos tienen la oportunidad de ver, como el Convento Sangchhen Dorji Lhuendrup Lhakhang, que tiene una impresionante ubicación en la cima de una montaña. Para actividades más activas, el campamento puede organizar excursiones de rafting por el río Mo Chu, caminatas por los valles circundantes y paseos en bicicleta de montaña a los pintorescos pueblos antiguos que salpican las laderas.
El Spa
Durante mi visita, el spa aún estaba en construcción (unas pocas semanas después de que el campamento comenzara a recibir huéspedes), pero cuando abra, será un pequeño lugar de salas de tratamiento para masajes butaneses totalmente naturales y baños de piedras calientes ricos en minerales.
Ofertas para toda la familia
La mayoría de las actividades, desde juegos de dardos butaneses hasta clases de cocina en la cocina al aire libre, son divertidas para todas las edades. La Villa Familiar cuenta con dos habitaciones y una piscina privada, mientras que los sofás en la planta baja de la Casa del Río se pueden convertir en camas.
Accesibilidad y Sostenibilidad
Las habitaciones de la villa familiar en &Beyond Punakha River Lodge, son accesibles en silla de ruedas, y se pueden colocar rampas para cubrir algunos de los escalones alrededor de la propiedad. Dicho esto, el paisaje es montañoso y los senderos están hechos de piedras de paso, lo que deja la mayor parte del resort fuera del alcance de los huéspedes con movilidad reducida.
En cuanto a la sostenibilidad, se prohíben los plásticos de un solo uso y el campamento obtiene casi todos sus ingredientes de cocina a nivel local. Al igual que sus contrapartes africanas de &Beyond, se eligieron tiendas de campaña como una forma de no afectar la tierra, parte de la cual se destina para que los agricultores locales cultiven sus cosechas. Además, el campamento tiene como objetivo elevar a la comunidad local contratando a casi el 80% de su personal de aldeas locales, y la mayoría de ellos reciben capacitación en el trabajo para esta primera incursión en sus carreras en hospitalidad.
Ubicación
Cada visitante en Bután debe viajar con un guía y un conductor (que &Beyond puede ofrecer a través de su división de operadores turísticos), lo que pone las atracciones de Punakha al alcance. La principal atracción del valle, uno de los dzongs más antiguos y bonitos de Bután, está a unos 20 minutos en coche, mientras que el viaje al Chimi Lhakhang (templo de la fertilidad) menos visitado llevará unos 45 minutos.
También hay muchas atracciones a poca distancia a pie: el Khamsum Yuelley Namgyal Chorten, una estupa en la cima de una colina con borde dorado visible desde el resort, se puede llegar a través de una caminata de 40 minutos. Punakha se encuentra a unas tres horas de Thimphu y a cuatro horas del aeropuerto de Paro, lo que hace que valga la pena detenerse aquí incluso si visitas Bután solo por unos días.
Cómo tener el mayor valor de tu estancia
Las suites con tiendas, que son las habitaciones de nivel de entrada en &Beyond Punakha River Lodge, comienzan desde $890 dólaes por noche. No es barato, pero bastante más asequible que los competidores de cinco estrellas en el valle. Además, todo, desde comidas hasta bebidas y actividades (excepto tratamientos de spa y excursiones en el río) está incluido en esa tarifa.
Pero eso no es todo: la Tarifa de Desarrollo Sostenible de Bután te costará $100 dólares por cada día y necesitarás contratar un guía y conductor. Para hacer un viaje libre de problemas, la mejor manera es reservar a través de una de las agencias de viajes especializadas en Bután, como la división de operadores turísticos de &Beyond, que se encarga de todo, desde reservas de vuelos hasta visas, e incluso puede ofrecerte algunos beneficios adicionales en el campamento.
