Situada en el corazón del mar Mediterráneo, la isla de Mallorca es un destino atractivo para viajeros de todo el mundo. Conocida por sus impresionantes playas de aguas turquesas y su variada cultura, este «spot» balear cuenta, entre lugares increíbles, con el pequeño pueblo Canyamel, un lugar que equilibra tranquilidad, naturaleza y alta cocina. Y es que, entre sus calles se encuentra el restaurante Voro, dos veces galardonado con una estrella Michelin.
La playa de Canyamel fue distinguida con el emblema de Bandera Azul, un galardón que implica un compromiso constante hacia el medio ambiente y el turismo sustentable. Rodeada de pinos, montañas y mucha paz, la playa cuenta con todo lo necesario para pasar un día de tranquilidad con bares, tumbonas, duchas y sombrillas.
Así es la Playa de Canyamel, un símbolo de paz en Mallorca
Canyamel es un complejo turístico situado en el extremo oriental de la isla, en la municipalidad de Capdepera. Este pueblo costero se ha convertido en un refugio para quienes buscan unas vacaciones relajadas y desconectadas del ajetreo cotidiano.
Su nombre tiene su origen en la introducción del cultivo de caña de azúcar en el siglo XV. Aunque poco rentable y de corta duración, el cultivo dejó una marca histórica en la región. En tanto, el Torrente de Canyamel -ó río Estany- que irriga el área, es un hábitat natural para diversas aves marinas.
Según remarca la Consejería de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno de las Islas Baleares, la playa es accesible a través de la carretera PM-4042 y se encuentra cerca del Cap Vermell y las Cuevas de Artà, famosas por atraer a figuras como Alejandro Dumas y Julio Verne. También se puede visitar la Torre de Canyamel, una antigua atalaya del siglo XIII.
Actualmente, Canyamel cuenta con un campo de golf de 18 hoyos ubicado cerca de la playa y una discreta pero suficiente cantidad de hoteles y restaurantes que acompañan el ritmo del crecimiento cuidado de la región. En tanto, existen otros puntos de interés turístico local, como los yacimientos arqueológicos de la Edad de Bronce, las cuevas costeras en las que es posible practicar snorkel y navegación a vela y finalmente, la torre gótica restaurada que exhibe obras de diversos artistas locales.
Voro, el restaurante de Canyamel con dos estrellas Michelin
No cabe ninguna duda de que uno de los principales atractivos de Canyamel es el restaurante Voro, galardonado con dos estrellas Michelin. Situado en un edificio independiente del Cap Vermell Grand Hotel, Voro demuestra su ambición de ofrecer una experiencia culinaria excepcional.
En sus bellos comedores de techos altos, el chef Álvaro Salazar presenta una filosofía gastronómica sin ataduras, comprometida con el entorno y las raíces mediterráneas. Los menús degustación Voro y Devoro sorprenden tanto por su presentación meticulosa como por su narrativa a través de cada plato, con guiños a la trayectoria del chef, su tierra natal de Linares, la isla de Mallorca y el mar Mediterráneo.
Los menús, que combinan platos de temporada con iconos de la casa, se desarrollan en tres etapas alusivas al sol: Albor, Zénit y Ocaso. En esta línea, podría decirse que esta experiencia gastronómica única que reafirma a Mallorca como un destino culinario de primer nivel.
