
Cuando llegan los días fríos, las luces empiezan a encenderse y los mercadillos llenan las plazas, apetece escapar de la ciudad para vivir la Navidad en lugares con encanto. Cerca de Madrid hay pueblos que parecen sacados de una postal invernal: calles empedradas, mercados navideños, rutas naturales entre montañas y actividades pensadas para toda la familia. Si estás buscando destinos para una escapada de fin de semana cerca de Madrid, aquí tienes algunos de los pueblos más navideños y encantadores.
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Buitrago del Lozoya: Navidad medieval junto al río
A menos de una hora de Madrid, Buitrago del Lozoya es uno de los pueblos más bonitos y navideños de la Sierra Norte. Su recinto amurallado, perfectamente conservado, acoge todos los años un tradicional mercadillo navideño con artesanía, productos locales y actividades infantiles. Además, su famoso Belén Viviente, declarado Fiesta de Interés Turístico Nacional, convierte sus calles medievales en un escenario mágico. Pasear junto al río Lozoya, en pleno invierno, es uno de los planes favoritos de quienes buscan naturaleza y tradición.
Chinchón: luces y sabor tradicional

Chinchón es otro de los destinos navideños más recomendables cerca de Madrid. Su Plaza Mayor, una de las más fotogénicas de España, se ilumina con motivos navideños y acoge actividades como coros, mercadillos y degustaciones de repostería típica. Aquí se pueden probar dulces de convento, anís de Chinchón o sus tradicionales ajos, que decoran incluso los belenes locales. Además, muchos alojamientos rurales organizan cenas navideñas y escapadas románticas para disfrutar del pueblo en pareja.
Rascafría: naturaleza, nieve y espíritu navideño

Si buscas un destino navideño rodeado de naturaleza, Rascafría es la opción perfecta. Situado en pleno Valle del Lozoya, es un lugar ideal para hacer rutas entre bosques, visitar el Monasterio de El Paular o pasear entre abetos nevados si el tiempo acompaña. En Navidad, el pueblo se llena de luces, figuras decorativas y mercados artesanales. Es una escapada ideal para familias y para quienes quieren desconectar en un alojamiento rural con chimenea.
Sepúlveda: belenes, historia y gastronomía castellana

Aunque está a algo más de una hora y media de Madrid, Sepúlveda merece una escapada de fin de semana. Este pueblo segoviano destaca por su ambiente navideño, sus belenes artesanales y sus calles empedradas decoradas para la ocasión. Además, aquí se come uno de los mejores asados de lechazo de Castilla. A pocos kilómetros se encuentra el Parque Natural de las Hoces del Río Duratón, una ruta preciosa incluso en invierno, con buitres sobrevolando el paisaje.
Patones de Arriba: encanto rural y decoración navideña
Uno de los pueblos más pintorescos de la Comunidad de Madrid, tanto por su arquitectura negra como por su ambiente tranquilo y acogedor. En Navidad, Patones de Arriba se llena de luces discretas, tiendas con decoración típica y restaurantes donde disfrutar de cocina de montaña. Es ideal para una escapada romántica, pasear por sus callejuelas empedradas y disfrutar del paisaje.
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Navacerrada: nieve, luces y tradición serrana
A apenas una hora de la capital, Navacerrada tiene todo lo que se necesita para vivir una Navidad de montaña: ambiente acogedor, decoración típica, chocolaterías con chimenea y rutas por el puerto nevado. Durante estas fechas, el pueblo organiza mercadillos artesanales, conciertos y actividades familiares. Es un destino ideal para quienes quieren combinar naturaleza, gastronomía y espíritu navideño.







