Situada en el corazón de Asturias, la ciudad de Oviedo combina a la perfección historia, naturaleza, cultura y gastronomía, convirtiéndose en un destino ideal para una escapada de fin de semana. Aquí te proponemos siete planes imprescindibles para disfrutar al máximo de la capital asturiana, desde sus monumentos legados del prerrománico hasta sus sidrerías tradicionales.
Paseo por el casco histórico
Comienza tu visita en el casco viejo de Oviedo, un entramado de calles empedradas, soportales y edificios de piedra que invitan a perderse. No te pierdas la Catedral de San Salvador de Oviedo, con su Cámara Santa declarada Patrimonio de la Humanidad, y la plaza de la Catedral, perfecta para sentarte en una terraza y observar el ir-y-venir de la ciudad. Esta zona también alberga museos pequeños y tiendas de artesanía local.
El prerrománico asturiano
A solo unos minutos del centro, el conjunto de iglesias del Camino del Prerrománico —como Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo— es una visita obligada para entender los orígenes del Reino de Asturias. Construidas en el siglo IX, estas joyas arquitectónicas ofrecen vistas magníficas sobre Oviedo y permiten vivir un viaje en el tiempo.
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Sidra, cocina asturiana y ambiente local
En una escapada a Oviedo no puede faltar el ritual de la sidra. Dirígete al barrio de La Rúa o al de Perlora, abarrotados de sidrerías tradicionales, donde los locales escancian la sidra y sirven platos como el cachopo, fabada o queso de cabrales. Disfrutar de la gastronomía asturiana es una experiencia sensorial y social por excelencia.
Mercados, cafés y las mejores vistas
El mercado tradicional de El Fontán es ideal para empaparse del ambiente local: puestos de productos frescos, charlas entre vecinos y cafés en terrazas. Después, sube al Monte Naranco, desde donde obtendrás panorámicas espectaculares de la ciudad y podrás visitar la escultura del Cristo del Naranco, uno de los emblemas de Oviedo.
Museos e iglesias con encanto
Para una dosis de arte e historia, visita el Museo de Bellas Artes de Asturias, con obras de El Greco, Goya y artistas contemporáneos. Además, es imprescindible la visita a la Basílica de San Julían de los Prados, uno de los exponentes más importante del arte y la arquitectura prerrománica de Asturias. Ambos espacios permiten alternar la naturaleza exterior con momentos de reflexión cultural.
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Naturaleza cerca de la ciudad
A solo media hora en coche desde el centro de Oviedo puedes llegar al Parque Natural de Las Ubiñas–La Mesa para disfrutar de rutas de senderismo fáciles, miradores y tranquilidad. También puedes dar un paseo relajado junto al río Nalón o en el entorno del parque del Campo de San Francisco, en pleno centro urbano y perfecto para descansar al sol con una sidra en mano.
Vida nocturna y barrios con encanto
Al caer la tarde, descubre los barrios emergentes de Oviedo, como Travesía de La Estación y la zona de La Rúa, donde se concentran bares de tapas, coctelerías y sidrerías con ambiente relajado. Si el viaje coincide con un concierto o espectáculo en el Auditorio Príncipe Felipe, reserva entradas y alarga la noche. Es una forma perfecta de cerrar un fin de semana combinando tradición y modernidad.
