En 1953, la imagen de dos enamorados subidos a una Vespa surcando las calles de Roma se transformó en un icono de la cultura pop. Eran Gregory Peck y Audrey Hepburn, interpretando a la princesa Ann y al periodista Joe Bradley, en Vacaciones en Roma (Roman Holiday), la película dirigida por William Wyler. Han pasado más de 70 años desde el estreno y esta bonita historia sigue cautivando a espectadores en todo el mundo. Si eres uno de ellos y estás planeando un viaje a la capital italiana, aquí tienes las localizaciones reales de la película para visitarlas.
De Florencia a Roma: el viaje en tren que une historia, arte y sabores en Italia
El estudio que se encargó de Vacaciones en Roma, Paramount, quería rodarla en sus escenarios de Hollywood. Sin embargo, William Wyler se empeñó en viajar a Roma para captar la esencia de la ciudad. El estudio accedió a cambio de reducir fuertemente el presupuesto. Así, en vez de usar Technicolor, la película fue en blanco y negro. Además, necesitaban encontrar una actriz desconocida para el papel de la princesa Ann. La elegida en las pruebas de casting fue, nada más y nada menos, que una joven Audrey Hepburn. El resto, es historia.
El triunfo mundial de la película se debe a múltiples razones. El carisma de la pareja protagonista es inigualable. William Wyler es un director solvente y de reconocido prestigio. Audrey Hepburn se convirtió en una estrella instantáneamente y ganó el Oscar por su actuación. Por último, qué mejor escenario que las calles, las plazas y los monumentos de la eterna Roma. Comenzamos nuestro recorrido por Vacaciones en Roma.
El Vaticano
La película comienza con una imagen aérea de la plaza de San Pedro del Vaticano. Como sabrás, se trata del país más pequeño del mundo, la residencia del Papa y uno de los lugares de peregrinaje más importantes del mundo al tratarse del centro neurálgico de la Iglesia Católica. La columnata, la Basílica y las innumerables piezas de arte de los Museos Vaticanos son visita obligatoria si viajas a Roma. Belleza e historia en estado puro.
Palazzo Barberini
Los exteriores del Palazzo Barberini fueron utilizados como la residencia de la princesa Ann en Roma. Actualmente, este palacio barroco alberga la Galería Nacional Barberini Corsini, un impresionante museo con obras de autores como El Greco, Caravaggio, Rafael, Tintoretto, Tiziano y un largo etcétera. Aunque en la película solo se ve la fachada y el jardín, lo que guarda en su interior es el mejor arte pictórico de siempre.
Foro Romano
El arco de Septimio Severo, en el Foro Romano, es el monumento que alberga el primer encuentro entre Peck y Hepburn en Vacaciones en Roma. Estas ruinas, de tamaños impresionantes, son los restos del centro neurálgico de la antigua Roma. Puedes pasar un buen rato paseando por ellas y sus lugares más interesantes son la Vía Sacra, el arco de Tito, el propio arco de Septimio Severo, el templo de Antonino y Faustina o la Basílica de Majencio y Constantino.
Fontana di Trevi
La fuente aparece al fondo de uno de los paseos de Ann por la ciudad. Años más tarde, Fellini la volvería a retratar en La dolce vita (1960), con el baño de Anita Ekberg en las aguas del monumento. Actualmente, es uno de los lugares más masificados de Roma, por lo que se necesita pagar una entrada de dos euros para acceder hasta ella. La gran tradición de esta bellísima plaza es lanzar una moneda al agua.
Vía Margutta 51
El apartamento de Joe Bradley está en vía Margutta, 51. Después de la primera velada juntos, Peck observa a Hepburn bajar las escaleras de su portal de camino a la calle principal. Si eres un verdadero fan de la película, deberías acercarte hasta la calle porque sigue con un aspecto idéntico al que aparece en Vacaciones en Roma.
Plaza de España
Los protagonistas de Vacaciones en Roma se reencuentran en las famosas escalinatas de esta plaza. Es otro de esos lugares saturados de turistas, icónico. En ella desemboca la via dei Condotti, una de las calles más famosas de la ciudad para ir de compras. El nombre de la plaza viene de que la embajada de España en Italia está situada aquí desde el siglo XVII.
El Panteón
Ann y Joe van a la terraza del Café Rocca, al lado del Panteón, para cumplir el sueño de la princesa de poder sentarse en uno de los muchos locales de Roma. El Panteón es otro de los numerosos monumentos imprescindibles de la ciudad. Es una maravilla de la arquitectura con su planta redonda y su enorme cúpula coronada con un enorme tragaluz.
Coliseo
En el famoso coliseo, Joe le hace fotos a escondidas a la princesa para venderlas a la prensa. Este monumento es uno de los más famosos del mundo, todo un icono turístico en una ciudad repleta de ellos. Cuando en 2007 se constituyeron las Siete Maravillas del Mundo Moderno, el coliseo fue elegido entre ellas.
Bocca della Verità
En esta misteriosa escultura transcurre una de las escenas más icónicas de Vacaciones en Roma. Gregory Peck metió la mano en la boca y, al sacarla, la metió dentro de la manga de la camisa, simulando haberla perdido. Audrey Hepburn se sorprendió genuinamente porque esa acción no estaba en el guion. La reacción de la actriz fue tan verdadera que William Wyler la conservó para el metraje final. Si visitas este monumento, situando en el exterior de la iglesia de Santa Maria in Cosmedin, prepárate para hacer una larga cola y pagar dos euros de donativo si quieres hacerte una foto.
Castillo Sant’ Angelo
Esta imponente fortaleza se ve de fondo cuando Ann y Joe acuden a una fiesta en un barco en la orilla del Tíber. También se ve el histórico puede de Sant’ Angelo. El castillo, inicialmente planteado como mausoleo por el emperador Adriano, acabó siendo uno de los edificios militares más impresionantes de Roma. Hoy en día, puede visitarse su interior y subir a su terraza, con unas vistas inmejorables de la ciudad.
Palazzo Colonna
La última escena de la película transcurre en el interior de este recargado palacio romano. Joe espera a la princesa, ¿saldrá a quedarse con su amado? Actualmente, el palazzo Colonna puede visitarse y admirar una extensa colección pictórica.
