
Toledo, conocida como la «Ciudad Imperial» y la «Ciudad de las Tres Culturas», es una ciudad histórica ubicada en Castilla-La Mancha, España a un puñado de kilómetros de Madrid. Se encuentra situada sobre una colina a orillas del río Tajo, lo que le da un paisaje impresionante. A lo largo de su historia, Toledo fue un importante centro cultural y religioso, siendo capital del Reino Visigodo y sede del Primado de España.
Cristianos, musulmanes y judíos: fieles creyentes de las tres religiones convivieron durante siglos y dejaron huella en Toledo, una de las más interesantes y sorprendentes ciudades de España.
El pueblito que casi nadie visita en Toledo y tiene un maravilloso castillo y hermosos jardines

Qué ver y hacer en Toledo
Toledo es un lugar que llegó a ser Ciudad Imperial y cuya belleza supo reflejar El Greco en sus pinturas. Una ciudad de la que el viajero no puede irse sin asomarse a sus miradores, subir a su Alcázar, perderse por sus callejuelas o ver un atardecer desde los Puentes de Alcántara o San Martín. A menos de 80 kilómetros de Madrid, merece la pena dedicarle más de una jornada para ver la ciudad iluminada por la noche y conocerla en profundidad.
Lo primero que debes hacer en Toledo es visitar uno de los mayores patrimonios monumentales de Europa. Tras cruzar puertas como las de Bisagra, la de Cambrón o la del Sol que hoy permanecen abiertas para el viajero, comienza el laberinto de calles del casco antiguo, declarado Patrimonio Mundial. Se puede comenzar el recorrido conociendo:
- La mezquita Cristo de la Luz, con más de 1.000 años, es el monumento más antiguo de Toledo y uno de los más importantes de la arquitectura hispano-musulmana y mudéjar en España.
A continuación, las empedradas calles del antiguo Barrio Judío, una zona llena de encanto donde esperan:
- La sinagoga de Santa María la Blanca -la más longeva de la ciudad- y la sinagoga del Tránsito, que acoge el Museo Sefardí.
- El museo dedicado a El Greco. Su obra más famosa -«El entierro del Conde Orgaz»- está en la cercana iglesia de Santo Tomé.
Del legado cristiano, destacan:
- La Catedral del siglo XIII y sus vidrieras de colores, uno de los puntos fuertes de la ciudad.
- El Monasterio de San Juan de los Reyes -que se edificó para honrar a los Reyes Católicos-.
- El Alcázar, con su opulencia domina toda la ciudad.
Qué hacer y visitar más allá de los monumentos

Más allá de la «ruta clásica», Toledo ofrece mil cosas por hacer. A su increíble Mirador del Valle -al otro lado del río y desde donde se obtienen las mejores vistas- se unen otros como el de la Torre de la iglesia de los Jesuítas.
Para empaparse de su ambiente animado, nada como pasar por rincones como la plaza de Zocodover. Y a la hora de desayunar, comer o tomar algo, hay que remarcar que Toledo lleva años innovando y ofreciendo propuestas alternativas.
Siempre están los clásicos gastronómicos como las migas, las carcamusas, el cochifrito o los mazapanes; pero también da gusto adentrarse en el vanguardista Mercado de San Agustín o en los nuevos gastrobares y pedir desde croquetas de ciervo hasta platos vegetarianos o nuevas cervezas locales artesanas. Algo parecido pasa con las compras, pues a las tradicionales tiendas de espadas y damasquinado, se unen otras, por ejemplo, de moda vintage.
Los más activos pueden incluso «volar» sobre el río Tajo en una de las tirolinas más largas de Europa o animarse a caminar por una Senda Ecológica que sigue el curso del río. Para concluir, por la noche, es toda una experiencia unirse a una visita guiada sobre las leyendas y misterios de Toledo.
Cómo llegar a Toledo desde Madrid
Para llegar a Toledo desde Madrid en coche, puedes tomar la A-42, que te llevará a tu destino en aproximadamente 1 hora y 5 minutos. La distancia total del recorrido es de 72,4 km.