
Conocida como la tercera bebida más popular a nivel mundial, el café no solo ofrece ese impulso energético, también marca el inicio, la pausa y el cierre de nuestras jornadas.
Este elixir tan querido despierta nuestra curiosidad al explorar su cultivo y comercio, elementos vitales para países en desarrollo que encuentran en el café una fuente invaluable de ingresos. Brasil, Vietnam, Colombia, Indonesia, Etiopía, Honduras e India se destacan como los principales productores, contribuyendo conjuntamente con el 80% de la producción global.
Este viaje nos llevará por algunos de sus pintorescos pueblos cafeteros -sumados a otros impensados-, revelando paisajes cautivantes y sumergiéndote en la riqueza sensorial que solo el mundo del café puede ofrecer.
Salento, Colombia: entre cordilleras y aromas suaves

Colombia es el tercer productor mundial de esta bebida y sus granos, 100% arábicos, se cultivan en las elevadas cordilleras andinas, alcanzando altitudes de hasta 2000 m.s.n.m. Las condiciones climáticas y del suelo generan un café excepcionalmente suave y aromático, consolidando la reputación internacional de Colombia en la producción de café de alta calidad.



Salento es la población más antigua del Eje Cafetero y es famosa por sus coloridas casas de bahareque y por las plantaciones de café que la rodean. Su centro histórico fue reconocido como un sitio del patrimonio mundial en 2011, como parte del «Paisaje Cultural Cafetero».
De viaje por aquí puedes disfrutar de recorridos por las fincas cafeteras y explorar el Valle de Cocora, hogar de imponentes palmas de cera. En las fincas cafeteras, los amantes de la naturaleza pueden explorar el proceso del café. La Reserva La Patasola ofrece caminatas ecológicas, mientras que el Parque Natural de los Nevados brinda paisajes montañosos únicos.
Antigua, Guatemala: donde la tradición jesuita se une al café

En el siglo XVIII, los sacerdotes jesuitas introdujeron el café en Guatemala, llevándolo a sus monasterios en Antigua. Esta región, rodeada de volcanes, cuenta con suelos fértiles y un drenaje óptimo para los cafetos, produciendo algunos de los mejores cafés de Centroamérica, conocidos como Genuino Antigua. Con altitudes que varían entre 1.300 y 1.600 metros, Antigua ofrece un café refinado, dulce y equilibrado con un aroma exquisito.



Para vivir experiencias inmersivas en Antigua puedes visitar fincas como Filadelfia y La Azotea, con casi 150 años de historia, donde se puede presenciar todas las etapas del café, desde el vivero hasta la taza. En Filadelfia, un tour de dos horas incluye el proceso completo, seguido de una degustación. En La Azotea, una visita de una hora explora no solo el proceso, sino también el impacto cultural. Ambas experiencias ofrecen una conexión única con la tradición cafetera guatemalteca.
Una vez de regreso en la ciudad de Antigua podrás descubrir los mejores bares de café como Artista De Café, una moderna cafetería minimalista con bourbon monovarietal de Jalapa. Fernando’s Kaffee ofrece chocolate y café de alta calidad, buscando empoderar a los agricultores locales. The River Coffee House, orientado a la misión, financia actividades locales y capacita a su personal para marcar la diferencia en la comunidad, creando un ambiente acogedor y luminoso.
Villa Rica, Perú: la capital del café fino del mundo
En las elevadas zonas andinas de Perú, específicamente sobre los 1500 m.s.n.m se cultiva uno de los cafés más apreciados del mundo. A solo 66 kilómetros de Oxapampa, el pueblo de Villa Rica es reconocido como la «Capital del café más fino del mundo» y deslumbra por sus casi 8.000 hectáreas de cafetales, siendo el 80% de ellas cultivadas por pequeños caficultores.
El café de Villa Rica, con denominación de origen desde 2010, se distingue por su intensidad y sabor tostado, reminiscente al cacao. Como visitante, puedes conocer la Plaza de Armas, que exhibe una cafetera gigante y un monumento a la caficultura, y realizar la Ruta del Café en Finca La Torre, una experiencia turística que abarca el Centro de Interpretación del Café y degustaciones. También se pueden visitar atractivos naturales como la Laguna El Oconal, rodeada de humedales y aves; la Cascada El León; y las Cataratas El Encanto.
Perú, el destino para los fanáticos del birdwatching
Matagalpa, Nicaragua: fusión de cultura, naturaleza e historia

Matagalpa, situado a 130 kilómetros al noreste de Managua, es parte destacada de la Ruta del Café en Nicaragua. Este municipio ofrece medio centenar de recursos turísticos, incluyendo reservas naturales, cascadas, fincas cafetaleras, petroglifos y eventos culturales. Con su clima fresco y una fusión única de cultura, naturaleza e historia, Matagalpa ofrece a los visitantes una experiencia turística inolvidable.
Las visitas a las fincas locales brindan una visión detallada del proceso de cultivo, se comparte un almuerzo típico con una familia campesina nicaragüense y culmina con una degustación de café preparado por las mismas familias productoras. La duración es de 5-6 horas, y el tour se realiza durante la cosecha de octubre a febrero, con opciones alternativas fuera de temporada.
Boquete, Panamá: entre tierras altas y plantaciones de geisha

Boquete, situado en las tierras altas de Panamá en la provincia de Chiriquí y cerca de la frontera con Costa Rica, destaca por sus tierras fértiles, exuberante vegetación y un clima fresco. La región está repleta de plantaciones de café, albergando algunas de las mejores fincas cafeteras del país. A pesar de la diversidad de tipos de café, la variante más destacada en esta zona es la variedad Geisha.
Este encantador pueblo se encuentra en un pintoresco valle con un río serpenteante. Su atractivo central es el inactivo Volcán Barú, que ofrece impresionantes vistas y un suelo volcánico rico que fomenta una flora y fauna excepcionales. En el área se ofrecen experiencias como la escalada en Los Ladrillos, rafting en el río Chiriquí Viejo, relajación en los pozos termales de La Caldera y exploración de tierras fértiles de cafetales y frutas. Bajo Boquete, el centro, es pintoresco con hoteles y restaurantes, mientras que Los Naranjos destaca por fincas de café y biodiversidad. Si viajas de diciembre a marzo, llegarás en pleno movimiento de la cosecha.
Coatepec, Veracruz, México: el café como estilo de vida

La historia del café en México se remonta al siglo XIX, siendo introducido por figuras como Don Mariano Michelena en Michoacán o Jaime Salvat en Yautepec, Morelos, alrededor de 1822. Sin embargo, hay quien dice que desde 1808, Coatepec, en Veracruz, se transformó en un pueblo dedicado al cultivo de café, cuando una semilla de cafeto arábigo fue importada desde Cuba y plantada en las prolíficas tierras de la Hacienda de Zimpizahua.
Caminar por Coatepec significa explorar la rica historia cafetalera de las antiguas haciendas, ahora transformadas en hoteles o museos. La Ex Hacienda de Zimpizahua, conocida por la producción de caña y aguardiente en el pasado, ofrece servicios de hospedaje y restaurante. La Ex Hacienda de Orduña, hoy la Ceiba Gráfica, ha evolucionado desde su dedicación a la producción de caña de azúcar y café en el siglo XVIII. La Hacienda El Trianón, en actividad desde 1901, preserva muebles originales y obras de arte talladas en hierro forjado.
Este pueblo mágico, declarado como tal en 2006, respira café desde que entras. Las cafeterías son un estilo de vida en Coatepec, ofreciendo café fresco desde su cosecha hasta la taza. Además, el museo del café está dedicado a preservar y explicar esta rica tradición cafetalera a quienes lo visiten, brindando la oportunidad de explorar las plantaciones, participar en la recolección de granos y conocer el proceso industrial para la elaboración de café de mesa o soluble.
El café de Coatepec, caracterizado por su altitud y un clima predominante de niebla durante gran parte del año, ofrece una experiencia única con variedades de cafetales como typica, bourbon, mundo novo y garnica. La mejor época de cosecha abarca de noviembre a marzo.
Zaruma, Ecuador: entre oro y cafetales de altura

Zaruma es una ciudad patrimonial en Ecuador ubicada en la provincia de El Oro que fue declarada Pueblo Mágico en 2019 y destaca por su historia de explotación aurífera y su excelente café. La ciudad, con edificios patrimoniales y calles zigzagueantes, atrae a visitantes por sus bares, cafés y la oportunidad de explorar la mina Sexmo. Además, a pocos kilómetros, el cantón Arenillas ofrece opciones turísticas, como el Hillary Resort, un hotel cinco estrellas todo incluido vinculado a un entorno natural y luminoso. La cafetería El Cafetal ofrece degustaciones de café molido de los cafetales locales.
La localidad adquirió mayor distinción internacional luego de que abriera la cafetería Zaruma Gold Coffee, ubicada en Brooklyn. Su dueña, Diana Aguilar, abrió el negocio y aunque el éxito no llegó de inmediato, la familia perseveró durante más de 15 años, comprando café directamente de productores ecuatorianos. La cafetería se destaca por su ambiente familiar y por promover el café de Zaruma en Nueva York.
Carmo de Minas, Brasil: el epicentro de la diversidad
Brasil es el principal productor mundial de café, aportando el 30% del café arábica importado en Europa. La bebida se cultiva principalmente en el sudeste del país, a altitudes no superiores a 1.200 metros sobre el nivel del mar. La diversidad y extensión del cultivo brasileño dificultan una definición precisa de su café, aunque en general se caracteriza por ser robusto, con poco amargor y acidez.
La ciudad de Carmo de Minas, a 5 horas de San Pablo, es una región cafetera de renombre, siendo el 75% de sus ingresos provenientes del café. La Finca Sertão es pionera en la producción de café de alta calidad, habiendo ganado premios significativos. Desde allí puedes hacer un tour inmersivo que comienza en San Lorenzo, incluyendo el museo del café y la posibilidad de un vuelo en globo para apreciar los extensos campos de cultivo.
La Rota do Café Especial permite conocer todo el proceso, desde la cosecha hasta la degustación del café. Carmo Coffee, sello que agrupa las haciendas de especialidad en la zona, destaca por sus procesos sustentables y comercio justo. Con solo el 10% del café mundial clasificado como gourmet o de especialidad, esta región se ha destacado por producir gran parte de la variedad Bourbon amarillo para marcas famosas como Nespresso
Blue Mountains, Jamaica: tras los pasos del café gourmet

El café Jamaica Blue Mountain (JBM) no solo es una exquisitez, sino que también tiene una historia rica y distintiva. Originado en cafetos llevados a Jamaica desde Martinica por orden del rey Luis XV de Francia, JBM ha ganado una reputación como un café «gourmet» con un sabor único, aún cuando representa solo el 2% de la producción mundial de café.
Para ser considerado JBM, el café debe provenir de una región específica en las Montañas Azules de Jamaica, cultivarse a una altitud superior a los 900 m.s.n.m. y ser de la variedad arábica, especialmente la mutación Típica. Esta región de elevada altitud se caracteriza por un clima frío, envuelto en neblina y notablemente lluvioso. La distinción de este café radica en su excepcional sabor, destacando por su ligero aroma frutal y a chocolate, con sutiles matices de pimienta.
El pico Blue Mountain, la montaña más alta de Jamaica, se ubica en el límite entre las parroquias de Portland y Santo Tomás. Es un paraíso para excursionistas y campistas porque ofrece vistas panorámicas, cascadas cristalinas y exuberantes selvas. La lista de posibles actividades incluye recorridos en bicicleta cuesta abajo, senderismo por colinas boscosas, visitas a cascadas, picnics en la cima y exploración de plantaciones de café. El área, además, alberga plantas únicas, algunas de las cuales no se encuentran en ningún otro lugar del mundo, y forma parte del Parque Nacional Montes Blue y de John Crow, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2015.
Jatiluwih, Bali, Indonesia: café entre terrazas de arroz

Aunque Bali es famosa por sus arrozales en terrazas, la región de Jatiluwih también ha incursionado en la producción de café. Este pintoresco pueblo ofrece la oportunidad de explorar las terrazas de arroz y visitar pequeñas plantaciones de café donde degustar granos locales junto con vistas impresionantes de los campos.
Las terrazas de arroz de Jatiluwih fueron reconocidas como Patrimonio Mundial de la Unesco en 2012 y son un elemento crucial en la cultura y religión balinesas. En esta área, sin embargo, además de arroz se está cultivando el café Kopi Luwak, elaborado a partir de granos semi-digeridos expulsados por un animal llamado civeta. Para conocer el proceso, se pueden visitar la finca Bali Pulina o las plantaciones de Jatiharum Luwak, donde tendrás la oportunidad de degustar 15 variedades de café y té aromático, además de aperitivos orgánicos, como pastel de arroz orgánico, elaborados con productos frescos de su finca local.
Da Lat, Vietnam: el renacer cafetero en las Tierras Altas

Si bien ha sido subestimado por dedicarse principalmente al cultivo de café Robusta, utilizado en cafés instantáneos, Vietnam desempeña un papel crucial en la producción global de café, siendo el segundo mayor productor mundial. Sumado a ello, en los últimos años, Da Lat, en las tierras altas de Vietnam, se ha ganado la reputación de ser un destino cafetero emergente en Asia.

La meseta de Lang Biang, situada 12 kilómetros al norte de la ciudad de Da Lat, es el lugar en el que está asentada la comunidad K’Ho, una minoría étnica que se es considerada como la primera comunidad de agricultores de café de Vietnam. En 2012 fundaron una cooperativa que sigue prácticas agrícolas orgánicas y ha modernizado la industria cafetera, enfocándose exclusivamente en el cultivo de granos de arábica, buscando cambiar la percepción negativa de la calidad del café vietnamita.
Su granja y tostaduría K’Ho Coffee ofrece una experiencia única, en la que puedes participar en el proceso de eleboración con sus métodos tradicionales y disfrutar de la calidad excepcional del café K’Ho, destacado en pruebas internacionales de cata. Además, la ciudad en sí misma, con su clima fresco y arquitectura francesa colonial, proporciona un ambiente encantador para disfrutar de una buena taza de café.
Chikmagalur, India: mucho más que té

India, célebre por su té chai, también se distingue como uno de los principales productores de café, y Chikmagalur, en el estado de Karnataka, se erige como la cuna del café en el país. Según cuentan, Baba Budan Giri, un peregrino sufí del siglo XVII, introdujo el café en Chikmagalur al plantar siete semillas contrabandeadas de La Meca. Esta acción dio lugar a extensos cultivos de café, convirtiendo a Chikmagalur en un destino para amantes de la bebida y de las colinas brumosas.
Situado entre colinas y valles, este pueblo cafetero invita a explorar sus plantaciones, participar en catas de café y sumergirse en la rica historia del cultivo en India. La mayoría de los alojamientos, como The Serai o Arabidacool Bungalow, están ubicados entre las plantaciones, facilitando la inmersión en esa paleta interminable de tonalidades verdes.
Explorar las plantaciones durante la temporada de cosecha, de enero a marzo, ofrece una experiencia única, pero visitar Chikmagalur durante los meses de monzón (a partir de julio) tiene un encanto especial. Nada se compara con pasear entre las exuberantes fincas de café bajo una suave lluvia.

Desde Chikmagalur también se puede conocer el Mullayanagiri, la cima más alta de Karnataka. El trekking hasta el pico ofrece vistas panorámicas, mientras que las cercanas Cataratas Hebbe proporcionan un espectáculo impresionante en medio de densos bosques. Chikmagalur también sirve como puerta de entrada a las maravillas históricas de Belur y Halebid, destacando la brillantez artística del Imperio Hoysala en sus templos tallados.
Yirgacheffe, Etiopía: el origen de todo

En el siglo IX, Etiopía vio nacer al café, y hoy, después de 1.200 años, se posiciona como el quinto productor mundial con una impresionante producción anual de 450 mil toneladas. Yirgacheffe destaca por sus excepcionales cafés, mayormente procesados lavados, aunque algunos son naturales. Sus cafés, de cuerpo medio y brillante, se caracterizan por sus sabores florales y cítricos.
Como intrépido viajero, aquí puedes explorar las plantaciones locales y participar en ceremonias tradicionales de preparación de café, con un enfoque especial en la experiencia sensorial dado que en esta tierra se celebra uno de los rituales más auténticos para servir café, conocido como «jebena buna».
Nyeri, Kenia: en manos de pequeños productores

Kenia es conocida por sus cafés de alta calidad, y la región de Nyeri, al norte de la capital, ocupa el segundo lugar entre las regiones cafetaleras del país. Con siete distritos cafetaleros, más de 78.000 familias cultivan aproximadamente 12.480 hectáreas de café arábica, incluyendo variedades como SL28, K7, Ruiru11 y Batian.
El café en Nyeri es cultivado por pequeños productores alrededor de estaciones de lavado en las laderas del Monte Kenia y la cordillera de Aberdare. Aunque no producen lotes grandes, los agricultores colaboran y sus cosechas se agrupan para vender como café Kenia de especialidad. El café resultante es limpio y afrutado, con notas de mora, arándanos y chocolate. El establecimiento de estaciones de lavado independientes ha mejorado las condiciones de vida de los pequeños productores y ha impulsado la producción de cafés de especialidad en la región.
Si llegas hasta aquí puedes explorar las cooperativas de café, aprender sobre los métodos de procesamiento y disfrutar de las vistas pintorescas de las plantas.
Agaete, Gran Canaria: la sorpresa de Europa

Agaete, un municipio costero ubicado a 30 kilómetros de la capital de Gran Canaria, es el único lugar en Europa donde se produce café. Las primeras plantas llegaron al valle en el siglo XIX, provenientes del Jardín de Aclimatación de La Orotava y se cultivaron junto a plataneras y otros frutales subtropicales, aprovechando las condiciones climáticas.
La isla ha visto un resurgimiento en la producción de café en los últimos años gracias a elogios de expertos y chefs locales que destacaron su calidad afrutada y dulce. Aunque el rendimiento es bajo, con siete kilos de cerezas para un kilo tostado, el café de Agaete es considerado exótico y de alta calidad.
Para conocer las plantaciones puedes visitar la Finca La Laja, rodeada por las Montañas de Tamadaba, donde se cultivan cafetales a la sombra de árboles frutales tropicales, aprovechando un acuífero local y agua de manantial rica en hierro y azufre. La variedad de café arábica Típica se cultiva a altitudes superiores a 400 metros, ofreciendo propiedades distintivas en función de la altitud. La Finca Los Castaños, ubicada en las tierras altas, también cultiva café arábica a una altitud que oscila entre los 600 y 1.100 m.s.n.m.
La degustación de este café afrutado, dulce y aromático, con ciertos matices ácidos y un regusto amargo muy característico, se complementa con productos locales como el queque, queso y chorizo, promoviendo una experiencia única y auténtica en el corazón de Gran Canaria. Además, el entorno pintoresco de Agaete, con sus montañas y vistas al océano Atlántico, agrega un toque especial a la experiencia cafetera.
Bonus Track: Sicilia, Italia
En Sicilia, Italia, el tostador Angelo Morettino comenzó un proyecto experimental de cultivo de café hace casi treinta años, pero la producción no había prosperado nunca hasta el 2022. Aunque la cosecha inicial de café siciliano fue de solo 30 kilos, el proyecto muestra promesa, con planes de continuar experimentando con variedades de arábica y robusta en los próximos años. Este desarrollo se atribuye al cambio climático que ha traído un clima más tropical a la región.