Rio de Janeiro es una de esas ciudades que no necesita introducción. Es uno de los destinos de playa más icónicos en el mundo y todos sus visitantes saben más o menos qué van a hacer cuando la visiten. Comer, beber, recorrer, descansar y bailar entran siempre en el top de actividades, pero la ciudad tiene mucho más para ofrecer. En esta ocasión, mostramos tres experiencias lujosas para disfrutar Río de Janeiro de una manera diferente.
Emiliano Río de Janeiro: lujo, sostenibilidad y sofisticación en Copacabana
Navegar en yate
Río es especial no sólo por sus playas soñadas, sino por la geografía que las forma. La Bahía de Guanabara lo muestra a la perfección: 400 kilómetros cuadrados interrumpidos por decenas de islas, entre cerros y colinas. La compañía Let’s Go Sea propone recorrerlas y ver la ciudad desde una perspectiva exclusiva. Además del paseo, a bordo se puede disfrutar de masajes, grandes platos o DJ sets en vivo. Hay distintos horarios, pero está recomendadísimo hacerlo al atardecer, para ver la puesta del sol sobre el horizonte.
Sobrevolar la ciudad en helicóptero
Ver cualquier ciudad desde las alturas siempre está muy bien, pero hacerlo desde un helicóptero es aún mejor. La perspectiva desde los cielos es única: las playas de Copacabana e Ipanema, el Cristo Redentor, la Bahía de Guanabara, edificios modernos rodeados por las favelas. Dos compañías ofrecen el servicio: HeliSight y Helisul. En cambos casos, los pilotos ofician de guías, para aprovechar al máximo la experiencia.
Disfrutar de una cena exclusiva
Sabemos que en Río de Janeiro se come bien. Cualquier puestito ofrece cosas ricas para acompañar con una caipirinha helada. Pero también hay otro costado gastronómico en la ciudad. Entre las opciones, se destaca el restaurante Mesa do Lado. Batman Zavareze, Césio Lima y el chef Claude Trisgros crean menús degustación inspirados en los sabores, aromas y sonidos de la región. La experiencia es mega exclusiva, con doce comensales por noche.
