Almería es un lugar con una costa bendecida por más de 200 kilómetros de litoral. Playas salvajes, calas escondidas y arenales donde el tiempo se detiene. Para este verano, elegir Almería es apostar por la pureza del Mediterráneo y por un viaje sensorial entregado a la belleza del mar. Estas son las cinco mejores playas de Almería, rincones donde el mar se convierte en refugio y el sol en compañero inseparable.
Playa de los Muertos: la joya de agua cristalina

Aunque su nombre pueda sonar lúgubre, la Playa de los Muertos es una de las más bellas de España. Sus aguas turquesas y su arena blanca conforman una estampa inolvidable. Situada en Carboneras, dentro del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, se caracteriza por su transparencia, que invita al buceo y al snorkel. El acceso, tras un sendero descendente, hace que conserve su esencia virgen. Es el lugar perfecto para los viajeros que buscan una experiencia íntima con la naturaleza.
Playa de Mónsul: el icono cinematográfico

Famosa por aparecer en películas como Indiana Jones y la última cruzada, la Playa de Mónsul es un paisaje casi lunar. Sus dunas de origen volcánico y la gran roca que se adentra en el mar la convierten en una playa de postal. Aquí, el viento y la arena parecen jugar eternamente. Es ideal para familias, ya que sus aguas son tranquilas, y para quienes deseen sentir la magia de bañarse en un escenario que ha conquistado a cineastas y viajeros de todo el mundo.
Playa de los Genoveses: belleza en estado puro

A pocos minutos de San José, la Playa de los Genoveses ofrece un arenal virgen donde la vegetación mediterránea se funde con el mar. Sus más de un kilómetro de arena dorada invitan a largas caminatas y a tardes de calma sin interrupciones. No encontrarás chiringuitos ni construcciones; solo el rumor de las olas y el canto de las aves. Es la playa que mejor representa la esencia de Cabo de Gata: salvaje, libre y sin artificios.
Top 5 rutas de España para un roadtrip con amigos
Las Negras: bohemia frente al mar

El encanto de Las Negras va más allá de su playa de guijarros oscuros. Este pequeño pueblo pesquero conserva un ambiente bohemio que seduce a artistas y viajeros alternativos. Su bahía es perfecta para nadar y disfrutar de la cercanía de calas escondidas como la de San Pedro, accesible a pie o en barco. Pasar una tarde en Las Negras es sentir la calma de un Mediterráneo auténtico, con un horizonte que parece no tener fin.
Playa de San José: esencia mediterránea

La Playa de San José combina la belleza natural con servicios que hacen cómoda la estancia. Es la más popular del Parque Natural, gracias a su arena fina, aguas claras y ambiente familiar. Desde aquí, muchos viajeros parten hacia excursiones en kayak o rutas de senderismo que bordean el litoral. San José, con sus casas blancas y su aire mediterráneo, completa una experiencia donde mar y pueblo laten al mismo ritmo.








