Cierra los ojos e imagina esto: acabas de bajarte de un largo vuelo y estás desesperado por una siesta. Después de tomar un taxi hasta tu hotel y hacer el check-in rápidamente, finalmente llegas a tu habitación, retiras el edredón y te acurrucas en la cama. Ahora, ¿de qué color son las sábanas que imaginas? Estamos casi seguros de que estás pensando en sábanas blancas, ya que es lo que todos esperamos ver al llegar a un hotel. Pero, ¿por qué los hoteles suelen usar sábanas blancas? Según algunos expertos en hoteles con los que hablamos, se trata un poco de uniformidad y un poco de psicología.
«Después de la seguridad, la limpieza siempre es la primera prioridad del hotel. Las sábanas blancas y crujientes le recuerdan al huésped lo limpio que está el hotel», comentó Delane McCoy, gerente general de área para Coury Hospitality, quien también supervisa el Colcord Hotel en Oklahoma City, a Travel + Leisure. «La cama del hotel es el punto focal de cualquier habitación, y toda la atención se dirige allí. Una cama con sábanas frescas, crujientes y blancas le da al huésped la tranquilidad de que toda la habitación está limpia y desinfectada».
Y aunque es excelente para la tranquilidad de los huéspedes, esta elección de sábanas también ayuda al personal de limpieza del hotel.
«Esto también ayuda al personal de limpieza a identificar cuándo las sábanas necesitan una limpieza extra o deben ser reemplazadas», agregó Brooks Ferring, propietario de The Berkeley Hotel en Denver. «Muchos hoteles de lujo prefieren las sábanas blancas por estas razones prácticas».
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Y, como señaló Craig Strickler, presidente de las Américas en Valor Hospitality Partners, los hoteles también utilizan sábanas o toallas blancas porque estos materiales permiten un proceso de lavado más sencillo. «Además, el blanco no ‘pierde su color'», añadió Strickler. «Esto permite que las sábanas y las toallas duren más que las hechas con material de color».
Hay una razón práctica más por la que los hoteles eligen sábanas blancas. Como señaló Amber Edwards, gerente general de The Hamilton Alpharetta, tener una cama blanca es la base perfecta para una habitación bien diseñada, lo que permite que todos los pequeños detalles resalten.
«La belleza de la ropa de cama blanca y crujiente es que complementa el diseño de la habitación, permitiendo que otros elementos, como las mantas suaves, los elegantes cojines y la decoración cuidadosamente elegida, destaquen y creen un aspecto elegante y cohesivo», dijo Edwards. «Este enfoque atemporal refleja el ambiente refinado de un hotel de lujo, asegurando que los huéspedes se sientan bienvenidos en un espacio que parece personalizado y pulido».
Así que, ahí lo tienes. Mucho pensamiento se ha invertido en las simples sábanas blancas, que aseguran que no solo te guste el aspecto de tu habitación de hotel, sino que también te sientas cómodo en ella. Ahora cierra los ojos y toma esa siesta.
