Madrid conserva la belleza de sus mercadillos. A pesar de que la modernidad permea cada uno de sus rincones, semana a semana, apostados en lugares estratégicos de la ciudad, los puestos se ubican uno junto al otro para ofrecer productos tan disímiles como atractivos. El Mercadillo de Majadahonda es uno de los más emblemáticos y grandes de la capital española con sus más de 180 puestos y el variopinto de sus artículos.
Este mercadillo es un verdadero paraíso para los amantes de las compras y aquellos que disfrutan explorando diferentes tipos de artículos. La variedad aquí es impresionante: desde ropa y calzado hasta frutas y verduras frescas, pasando por artesanías, artículos de decoración, y mucho más todo, a precios competitivos.
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Además de ser un excelente lugar para hacer compras, el Mercadillo de Majadahonda es también un atractivo turístico por sí mismo. La ubicación, en un área que sirve de aparcamiento los demás días de la semana, entre las calles Santa Catalina y Erillas, es de fácil acceso y permite a los visitantes disfrutar de una mañana completa de compras y exploración.
Cuándo puedes visitar el Mercadillo de Majadahonda
La historia del Mercadillo de Majadahonda también añade un toque especial; el primer mercadillo se situó en una zona de tierra frente a la Parroquia de Santa Catalina, y con el tiempo se ha trasladado y expandido hasta alcanzar su configuración actual.
El Mercadillo de Majadahonda se arma todos los martes y sábados. Los martes, el horario es de 9:30 a 14:00 horas, mientras que los sábados los puestos permanecen abiertos desde las 9:30 hasta las 15:00 horas.
Es importante tener en cuenta que el mercadillo no se celebra en días festivos como Navidad, Año Nuevo, Reyes y durante la semana de las fiestas patronales a mediados de septiembre.
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Qué puedes comprar en el Mercadillo de Majadahonda
El Mercadillo de Majadahonda es famoso por su amplia variedad de productos. Entre sus 180 puestos, los visitantes pueden encontrar ropa, calzado y bolsos de última moda a precios muy accesibles.
Además, hay una gran oferta de muebles, artículos de decoración, artesanía, textiles, artículos para el hogar, perfumería, cosmética, ferretería, bisutería, artículos de regalo, piel/marroquinería, complementos, plantas, y más.
Los puestos de frutas, verduras y encurtidos son especialmente apreciados por los residentes locales, quienes realizan su compra semanal en el mercadillo. La calidad y frescura de los productos alimenticios es uno de los mayores atractivos de este mercado.
